«Siento un profundo respeto por el Real Valladolid como club»

Sergio Kresic (Split, Croacia, 1946) vuelve a encontrarse con el equipo que mantuvo sin problemas durante dos temporadas en Primera y al que no logró subir de Segunda en la última etapa.

-Imagino que es la pregunta más repetida esta semana, ¿será especial el partido ante el Valladolid?

-Desde luego. Estuve allí tres años, en dos etapas [97-99 y 04-05] y sobre todo de la primera guardo muy buen recuerdo. La ciudad me parece muy bonita y siempre que puedo me acerco con mi mujer, porque allí viven mi hijo y mi nieta. Además tengo muy buenas amistades, de muchos años, desde la primera vez. Con respecto al club siento un profundo respeto y aprecio.

-¿Por eso volvió?

-Me llamaron cuando el equipo bajó a Segunda y fue una época complicada. Hicimos un buen trabajo, pero no alcanzamos el objetivo de volver a Primera. Hubo muchos problemas, pero prefiero no recordarlos y quedarme con las cosas positivas. Estoy muy agradecido al club y a sus dirigentes.

-¿Qué problemas?, si me permite.

-Cuando el equipo empezó a despuntar, sufrimos la desgracia del accidente de automóvil de Germán Hornos. Luego, Aduriz, que era otro hombre también muy importante, también se lesionó. Y Víctor apenas pudo jugar por unos problemas físicos. Eran tres futbolistas importantes de ataque y su ausencia nos pesó. No logramos remontar, aunque eliminamos al Real Madrid en la Copa, y el equipo bajó el ritmo. Llegamos a tener a siete titulares lesionados y nos costó lograr resultados. La directiva hizo lo que creyó que debía y no tengo nada que reprochar.

-¿Se le va hacer raro ver enfrente al Real Valladolid como rival?

-No, porque ya me he enfrentado a él con otros equipos: con el Murcia, Las Palmas, Mallorca.

-Es que ha estado usted en muchos.

-Once equipos, en 20 años que llevo en España. Han sido muchas ciudades y clubes que me han tratado como suyo y en todos ellos he dado lo mejor de mí y he defendido a muerte al club. Luego, ya mandan los resultados, pero nadie podrá dudar de mi profesionalidad.

-Este domingo tendrá enfrente a varios jugadores a los que entrenó en Valladolid.

-Es cierto: Marcos, Víctor, García Calvo, Óscar Sánchez. A algunos los tuve en mi primera época en Valladolid.

-¿Mantiene el contacto con ellos?

-Sí, siempre he tenido una relación cercana con ellos y nos llamamos en Navidad o cuando conseguimos algún éxito importante.

-Y les saludará, claro, pero antes o después, durante el partido, ¡rivales!

-Sí, pero son sólo 90 minutos, luego el trato es de afecto. Cuando les vea les saludará con muchísimo cariño, como he hecho con otros jugadores que están en otros equipos, como Ibagaza, Leo Franco, Eto'o. Además de grandes futbolistas son excelentes como personas.

-Este derbi es descafeinado, porque apenas hay rivalidad, pero sí tres puntos muy importantes para el Numancia. ¿Cómo lo ve?

-Necesitamos los puntos como el comer. Por ahora estamos fuera del descenso y queremos seguir así, terminar tranquilos el año. Sería un éxito para una ciudad tan pequeña para Soria y un club de presupuesto tan modesto como el Numancia. Nuestra filosofía es de objetivos a corto plazo, ir partido a partido.

-¿Y al Valladolid?

-El Valladolid es un rival duro: eficaz, práctico y peligroso, con gente importante, como Víctor, Canobbio, Sesma, Pedro León u otros que te pueden armar el lío en cualquier momento. Debemos estar concentrados al máximo y hacer un buen partido de principio a fin.

-¿Cómo está su equipo tras el varapalo de Málaga, con el árbitro por medio?

-Muy bien. A lo largo de la temporada hay altibajos en el juego, pero no en la actitud, que es lo que nos va a llevar por buen camino. Es la clave para superar al rival. Luego, puedes tener más o menos acierto, en Málaga tuvimos la posesión del balón pero al final nos faltó fortuna. En cualquier caso los jugadores están mostrando actitud, esfuerzo, profesionalidad y están comprometidos.