Olleros de Tera pide a la Junta que se restaure el retablo de Nuestra Señora del Agavanzal

Los vecinos de Olleros de Tera solicitan a la Junta que se restaure el retablo de la ermita de Nuestra Señora del Agavanzal como colofón a las obras ejecutadas para rehabilitar el templo. Así se lo expusieron ayer al delegado territorial de la Junta de Castilla y León, Alberto Castro, que inauguró el centro social de la localidad, tras un año de obras y más de 200.000 euros de inversión que han acometido de forma conjunta las administraciones regional, provincial y local.

Situado a las afueras del pueblo, muy próximo a las antiguas escuelas, el nuevo edificio consta de una amplia nave que reproduce la arquitectura del entorno, con techos y carpintería de madera. Para poder ser utilizado con diferentes fines se ha previsto un solo espacio que sirve como una amplia nave para reuniones que congreguen a todo el pueblo, pero la instalación de tabicado móvil permitirá dividir el espacio en pequeños espacios interiores donde multiplicar su cometido, de manera que se pueda disponer de biblioteca municipal o telecentro, entre otros servicios, explicaba ayer el alcalde, Manuel Fernández.

Tras la construcción acometida por la empresa Hermanos Tábara llega la hora de dotar de contenido el edificio, de manera que tanto vecinos como autoridades locales solicitaban ayer mismo al delegado el apoyo necesario para dotar de mobiliario el interior y poder así ponerlo en funcionamiento, un extremo que el representante de la Junta admitió en su totalidad, al entender la necesidad de un edificio de estas características en uno de los pueblos más pequeños de la comarca y, por tanto, con menores recursos.

Castro escuchó la solicitud de los vecinos para restaurar el retablo de la ermita de Nuestra Señora del Agavanzal, que completaría las obras de restauración acometidas años atrás en el santuario, una referencia para muchos pueblos de la zona.