Soria acoge este martes una jornada sobre el futuro de la biomasa forestal

La utilización de biomasa para generar energía térmica o eléctrica no es algo nuevo. Desde hace miles de años la biomasa ha sido una fuente energética esencial, incluso la principal hasta finales del siglo XVIII. Sin embargo, el desconocimiento social sobre qué es la biomasa es vasto; ¿es que ahora vamos a volver a la leña, la que recogíamos hace años para llevarla a casa y calentarnos? La respuesta es sí, pero leña transformada para producir una energía limpia y renovable que llega directa a las casas.

La energía de la biomasa deriva de materiales vegetales como madera de bosques, residuos de procesos agrícolas y forestales o aserraderos. Su utilización no es una receta mágica para salir de la crisis, pero sí constituye un ahorro económico para las familias, a la vez que se contribuye a reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera en un gesto de devolver a la naturaleza lo que nos presta. A la vez que los recursos de la biomasa suponen un retorno económico, también generan empleo local, una oportunidad para revitalizar el medio rural que ninguna administración debe desestimar.

La capital soriana será la anfitriona el martes 27 de la Jornada de Biomasa Forestal Situación actual y retos de futuro, que organiza El Norte de Castilla con el patrocinio de la Junta de Castilla y León. A partir de las 10.00 horas la Cámara de Comercio e Industria acogerá ponencias y debates con presencia de responsables de la Consejería de Medio Ambiente y de representantes de las empresas más importantes del sector. La inauguración correrá a cargo de José Manuel Jiménez, director general de Calidad y Sostenibilidad Ambiental de la Junta, y de Carlos Aganzo, director de El Norte de Castilla.

Un primer bloque estará dedicado a la disponibilidad y primera transformación de la materia prima. El sector de la biomasa en Castilla y León tiene un crecimiento destacado de potencia instalada que supera los 485 megavatios. La capacidad de producción de pellets y astilla como combustible asciende a 190.000 toneladas al año, lo que excede la capacidad de consumo de la Comunidad y lo que hace que las empresas vendan fuera de la región e incluso exporten.

Participarán el director de Medio Natural de la Junta, José Ángel Arranz; el director de Promoción y Producción de Cultivos Energéticos de Ence, Fernando Muñoz, y Marcos Martín Larrañaga, responsable de Relaciones Internacionales de AVEBIOM y vicepresidente de European Pellet Council. El gerente de Foresa y vicepresidente de ASEMFO, Ignacio Macicior, ofrecerá algunas pinceladas sobre el desarrollo de la biomasa forestal con aplicaciones térmicas. Tras las ponencias se celebrará una mesa redonda en la que se debatirá sobre la disponibilidad de la biomasa en un futuro, sobre los cultivos leñosos con fines energéticos y sobre su comercialización.

Un segundo bloque estará dedicado a los escenarios de futuro según la financiación disponible. La biomasa en el sector eléctrico, de la mano del director de Suministro de Gestamp, Aitor Tenería, abrirá la segunda parte. De le energía eléctrica, a la térmica a través de las redes de calor. Dos empresas con amplia experiencia en el diseño y gestión de Grandes Instalaciones Térmicas (GIT) como son Rebi y Cofely, explicarán qué es una Red de Calor Urbana y qué ejemplos de realidad construida se encuentran en Castilla y León. Virginia Borondo, directora técnica de Rebi; y Humberto Cerón, director de Mercado de Infraestructuras de Cofely, continuarán el tiempo de ponencias. La financiación de los proyectos es la base que sostiene el sector. De ello hablarán Jorge Manuel Pérez, director de Empresas de Burgos y Soria de La Caixa, y David Conde de la misma entidad. A la mesa redonda posterior se incorporará José Antonio Martínez, gestor de energía en Castilla y León de Eulen. Será el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, quien clausure la jornada.

Entre los objetivos de la cita se encuentran el fomento del ahorro, la eficiencia energética y la utilización de energías renovables. Metas que se alcanzan con la conexión de los edificios a las renovables como la biomasa. Se pueden conseguir ahorros energéticos importantes con la implantación de este tipo de redes en la región, puesto que instalaciones mal gestionadas y edificios ineficientes suponen una importante pérdida de energía que puede evitarse.

Por su parte, las empresas del sector, siguen reclamando instaurar una fiscalidad verde en el conjunto del país para promover un crecimiento de la economía más sostenible a través de actividades con un mínimo impacto ambiental. Siguen pidiendo a gritos que el Gobierno establezca un IVA reducido para la conversión de salas de calderas en la utilización energía térmica generada por biomasa. Se debe aumentar la competitividad de la biomasa, es uno de los sectores con mayor potencial de creación de empleo, tal y como ocurre ya en países como Alemania, Francia o Reino Unido. El bajo desarrollo de la biomasa en España se debe a la gran desventaja en materia fiscal frente a la situación de otros países europeos, los países anteriormente mencionados ya aplican sus tipos reducidos de IVA a los recursos de la biomasa frente al 21% de España.

Promover la implantación

Reivindicaciones que se pondrán de manifiesto en las mesas redondas del próximo martes en Soria, que también irán destinadas a los gestores de los ayuntamientos de la Comunidad; ¿qué pueden hacer ellos para promover la implantación de la biomasa?, lo que ya aplican consistorios como los de Cuenca, Almería, Arbúcies (Girona) o Lucena (Córdoba): incluir bonificaciones en los recibos del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de las viviendas que utilicen energías renovables, que tengan instaladas calderas de biomasa o que estén adheridas a una Red de Calor. Bonificaciones que pasan desde la exención del pago hasta reducciones que superan el 50% en el recibo. Hace tiempo que también se habla de la rehabilitación energética de viviendas, es otro cauce que había que explotar. Y algo básico, que es facilitar el acceso a los consumos medios de los edificios para promover la eficiencia. Poder disponer de los datos para elaborar diagnósticos y propuestas de ahorro voluntario o incluso penalizar el despilfarro energético. Sin duda la biomasa es una de las fuentes energéticas renovables con mayor potencial de crecimiento durante las próximas décadas, y Castilla y León uno de los lugares con mayores recursos aprovechables, así lo demuestra con el trabajo que llevan a cabo todos los implicados en este sector.