Tudanca plantea a la Junta un «plan de actuación urgente y coordinado» para las residencias de la comunidad

El PSOE de Castilla y León muestra su preocupación por la situación en la que se encuentran las residencias de ancianos de la comunidad y ha planteado a la Junta un plan para tratar de revertir el problema. «Somos la tercera comunidad autónoma con más fallecidos en las residencias, solo por detrás de Madrid y Cataluña, que tienen una población mucho mayor y no es comparable. La mortalidad es dramática. Más de la mitad de fallecidos por Covid-19 en Castilla y León están en residencias», ha recordado Luis Tudanca. El secretario general del PSOE de Castilla y León se ha sometido a una rueda de prensa con los medios regionales a través de la aplicación Zoom, donde ha ofrecido detalles de la propuesta elaborada por su partido.

Tudanca ha recordado que los datos oficiales divulgados por las consejerías de Sanidad y de Familia no coinciden y que el gobierno autonómico no facilita datos sobre las residencias privadas. Estos centros suponen dos tercios del total de las plazas. «Por eso vamos a hacer llegar a la Junta una nueva propuesta, un plan de atención urgente para las residencias de nuestra comunidad. Primero, para que elaboren un plan único de actuación coordinado entre las consejerías de Sanidad y Familia. Nuestro plan, elaborado por expertos, técnicos y profesionales sanitarios y de servicios sociales, tiene la única intención de aportar el criterio del Partido Socialista y de los profesionales para disponer de una actuación única y coordinada», ha subrayado Tudanca.

Ese plan contempla un aumento de las inspecciones en residencias públicas y privadas, la dotación de más recursos sanitarios, con contratación de profesionales «durante un largo periodo de tiempo», y la reapertura de las 500 plazas residenciales cerradas actualmente en la red pública. Además, el PSOE apuesta por la creación de un 'biobanco' con muestras y análisis de todas las personas fallecidas en las residencias, para determinar con certeza las causas de las muertes cuando se puedan efectuar todos los análisis. «Pedimos un sistema de datos homogéneo para no añadir confusión y que se faciliten los datos de residencias privadas. Esto último se hace en comunidades como Baleares o Asturias», ha añadido Luis Tudanca.

El Partido Socialista de Castilla y León solicita también que se mejore el sistema de atención e información a las familias de los residentes.

Tudanca ha repasado a través de la videoconferencia con los periodistas la evolución de la pandemia y ha defendido que la principal arma para hacer frente a la crisis del Covid-19 es «lo público». «Hoy se entienden aún menos los recortes que se hicieron en la sanidad pública en un pasado demasiado reciente o la defensa de las privatizaciones que se han hecho en nuestra comunidad».

El secretario general del PSOE de Castilla y León ha calificado los datos de contagios de los últimos días como «esperanzadores», pero ha recordado «que no está todo hecho». Además, ha lamentado que España sea «el único país del mundo en el que no existe unidad política». «La oposición del Partido Popular y Vox prefieren derrotar al Gobierno antes que el virus. Es intolerable. En cambio, la actitud de Ciudadanos es de lealtad y respeto a las decisiones del Gobierno de España y eso les honra. Nosotros defendemos que hacen falta unos nuevos Pactos de la Moncloa. Es el momento de nuestra generación y debemos estar a la altura».

En el plano autonómico, Luis Tudanca ha reclamado una «respuesta solidaria» de la Junta y ha pedido al gobierno de la comunidad que no se convierta en una «gestoría de fondos nacionales». «Nosotros intentamos hacer propuestas aunque sigan sin respuestas. Echo de menos la lealtad de la Junta con el Gobierno de España. En un tono más suave que el de la señora Ayuso, sigo viendo en el señor Mañueco ni una mala palabra pero tampoco una buena acción respecto al Gobierno de España», ha subrayado Tudanca.

El líder autonómico socialista ha admitido que la decisión adoptada por el Gobierno central para reabrir la actividad laboral no esencial es «compleja», pero se basa en el criterio de «expertos», del que hay que fiarse. «No podemos convertir cada una de las decisiones trascendentes en un foro de opinión. Cuando se adoptaron las primeras medidas duras de confinamiento escuché críticas por lo que suponía de ruina económica para Castilla y León y para España. Ahora escucho a los mismos, como la Junta, criticar el levantamiento de esas mismas medidas. No puede ser una cosa y la contraria. Pero el confinamiento no ha acabado, ni el estado de alarma».

Tudanca asegura que le resultó «enternecedor» ver Quim Torra y a los presidentes de las comunidades gobernadas por el PP «compartir argumentos, casi palabra por palabra» tras la reunión que mantuvieron los mandatarios autonómicos con Pedro Sánchez y en la que criticaron que el Gobierno no dé a conocer el informe de los expertos para la vuelta a las actividades laborales no esenciales. «Me pregunto qué habría pasado si hubiera sido al revés. Sembrar dudas sobre las decisiones que adopta el Gobierno no aporta nada. No dudo de que el criterio que aporta Mañueco se basa también en criterios técnicos. No dudo de su palabra y de su buena intención. Los expertos no siempre piensan lo mismo en diferentes momentos. No se debe trasladar dudas sobre las decisiones que se adopten».

Luis Tudanca ha explicado que el PSOE no ha recibido respuesta de la Junta al plan propuesto por los socialistas autonómicos para destinar 3.000 millones de euros a un fondo social para los colectivos más vulnerables. «Ese primer plan se lo hicimos llegar a la Junta el 28 de marzo. No hemos obtenido respuesta, ni afirmativa ni negativa».

Al final de su comparecencia virtual, a Tudanca se le ha preguntado cómo lleva el confinamiento en el plano más personal. «Tengo dos niñas pequeñas. No me queda espacio para el ocio ni para nada más. Afortunadamente mis hijas lo llevan muy bien. Creo que muchos tenemos suerte. No deja de ser frustrante lo que pasa en muchos hogares y la sensación de querer hacer más de lo que podemos para atenderlo. Es lo peor del confinamiento: la sensación de frustración permanente, de querer llegar a más y no poder. Por lo demás, no tengo queja. Mis hijas me están viendo más que en toda su vida. Les debía muchas horas y ahora las estamos recuperando. Se me están acabando los libros, eso sí. Las series no, porque son infinitas».