La punta de la crecida del Duero mantiene su nivel en alarma y sus riberas anegadas en Valladolid

El río ha anegado parques y áreas recreativas prácticamente en toda la provincia, con especial incidencia entre Peñafiel, Pequera de Duero, Valbuena y Tudela. También en la capital, a su paso por Puente Duero, el agua ha alcanzado ya la parte inferior de las viviendas situadas al borde del cauce, eso sí, sin conllevar desalojos. Aguas abajo de la desembocadura del Pisuerga, en Tordesillas, el río roza hoy los muros de las instalaciones del hotel Doña Carmen (cerrado por la pandemia), junto al puente, y el camping situado a continuación. El agua cubre allí prácticamente la arena de la playa fluvial.

El Pisuerga, entre tanto, ha alcanzado a su vez una punta superior a los quinientos metros cúbicos por segundo a su paso por la capital, donde mantiene anegados los paseos inferiores en el entorno del puente de Poniente y la playa. Su caudal parece estabilizado ahora y no ha llegado a alcanzar el nivel de alerta (619).

La punta de la avenida en el resto de afluentes, como el Cega, el Adaja o el Esgueva, parece también haber alcanzado su techo entre ayer y hoy. Solo el Adaja mantiene un pico notable de 96 metros cúbicos por segundos después de haber superado los cien en Valdestillas. El Cega, por su parte, mantiene una tendencia descendente con 58 metros cúbicos por segundo tras haber alcanzado un pico de 77 metros cúbicos el jueves.

Y el Esgueva, por último, presenta hoy un caudal claramente descendente, aunque aún mantiene anegadas las parcelas cercanas a su cauce en el valle que lleva su nombre. «Las tierras continúan anegadas y no tragan con tanta humedad», ha confirmado el alcalde de Villanueva de los Infantes, Jesús Palomo, quien espera ahora la llamada de la Confederación Hidrográfica del Duero para buscar una solución a los desbordamientos que se producen en su localidad con cada crecida del afluente del Pisuerga.

Las lluvias, en principio, darán una tregua en los próximos días después de diez días consecutivos con precipitaciones que han dejado, en el caso de la capital, más del doble de la cantidad habitual de todo el mes, con 56,2 litros por metro cuadrado recogidos hasta ahora, los cinco últimos durante la madrugada de este viernes.