Curioseando
La primera carrera de motos en ValladolidEl premio, por valor de 100 pesetas, fue para Narciso Carrión que alcanzó los 79.5 km/h en un tiempo de 45 segundos y tres quintos
Pronunciar la palabra motos en Valladolid no solo recuerda a la famosa concentración invernal de Pingüinos que acoge anualmente la ciudad y que, con los ... años, se ha convertido en la más importante de Europa. Hace más de cien años las motos fueron protagonistas por primera vez en las fiestas de la ciudad de 1916. El por entonces Moto Club Ciclista y el Ayuntamiento organizaron la que iba a ser la primera carrera de motos celebrada en la ciudad.
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Antes de estar de moda estos vehículos, la verdadera estrella del transporte de movilidad personal era la bicicleta. Esta no solo era utilizada para hacer deporte, sino que se convirtió en el medio de locomoción por excelencia para desplazarse al trabajo o hacer paseos largos. A principios del siglo XX ya existía en Valladolid una asociación ciclista para aquellos aficionados o deportistas que querían introducirse en el mundillo mientras simultáneamente la motocicleta comenzaba a causar furor en otras ciudades.
Poco tiempo después las motos circulaban por las calles de Valladolid para convertirse, más pronto que tarde, en un elemento más del paisaje urbano. En los números 6 y 8 de la conocida como calle de Alfonso XIII, actual Acera Recoletos, se albergaba desde 1896 la tienda de velocípedos de Enrique Gilardi. Con el paso de los años se convirtió en un gran impulsor de las bicis y de las motos, llegando a vender en su negocio vehículos de la marca Henderson.
La sede de la Asociación Ciclista, ubicada en los mismos locales del comercio, pasó a denominarse Moto Club Ciclista, para atraer la atención de los usuarios que utilizaban el novedoso vehículo de dos ruedas. Con la subida de ventas llegó la fiebre por las carreras y, al igual que otras ciudades como Madrid, Barcelona o Bilbao, Valladolid acogió en 1916 una prueba que consistía en recorrer en el menor tiempo posible un kilómetro, en este caso circulando por el Paseo de Zorrilla.
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Un kilómetro por 100 pesetas
El terreno estaba habilitado para que las motocicletas concursaran el día 29 de septiembre a las cuatro de la tarde. Una tormenta repentina obligó a suspender la prueba, y por tanto, posponer el 'kilómetro lanzado' hasta el 1 de octubre de 1916 a las once de la mañana.
La salida estaba situada en la Plaza de Zorrilla junto a la estatua del poeta y el cronómetro no empezaba a contar hasta llegar al número 12 de la vía. Allí instalaron un artilugio eléctrico que emitía un timbrazo siendo esta la señal para la salida del corredor, el cronometrador y el presidente del club, Enrique Gilardi. La meta estaba a unos metros de distancia de la Plaza de Toros, donde se colocó una gran pizarra con los nombres de los participantes y el tiempo que iban realizando.
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Con el Paseo Zorrilla abarrotado de público y con los corredores partiendo de la salida cada dos minutos para no entorpecer la marcha con sus maniobras, el ganador no tardó en salir. El premio, por valor de 100 pesetas, fue para Narciso Carrión que alcanzó los 79.5 km/h en un tiempo de 45 segundos y tres quintos. Al haberse concentrado tantos corredores, los pilotos tuvieron otra oportunidad para lucirse en una segunda carrera que tuvo lugar en la Carretera Madrid.
La próxima semana
Desde Curioseando por Valladolid descubrimos la historia de un callejón medieval oculto en el corazón de la ciudad.
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