La Usal crea una comisión para el octavo centenario ante la pasividad del Gobierno

El rector de la Universidad de Salamanca, Daniel Hernández Ruipérez, presentó ayer la Comisión Asesora de la institución para la celebración de su VIII Centenario. Una comisión propia de la Universidad, interna, creada con la intención de discutir proyectos e ideas, buscar apoyos y financiación para los grandes actos destinados a conmemorar el aniversario y para conseguir también, así lo afirmó el rector, que en 2018 la Universidad de Salamanca «sea una Universidad diferente, mucho mejor y con una mayor proyección de futuro».

Esta comisión aclaró Hernández Ruipérez- no sustituye a la interinstitucional, creada por Real Decreto 1980/2008 de 28 de noviembre como el órgano responsable de impulsar, canalizar y coordinar las actividades que se lleven a cabo con motivo de esta celebración. Pero, dada la situación con respecto a este órgano, que no se ha vuelto a reunir desde 2011, la Universidad ha decidido asumir el protagonismo para que la fecha más señalada en su calendario, ese octavo centenario desde que fuera fundado el Estudio General de Salamanca, no pase desapercibido. «Como la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáez de Santamaría, no ha reunido esa comisión todavía, nosotros vamos a tener un mayor papel que el que hubiéramos tenido de estar funcionando esa comisión», especificó el rector, que dijo sentirse «defraudado» con la actitud del Gobierno con respecto a esta conmemoración, para la que tampoco, todavía, se han previsto las desgravaciones fiscales que ayudarían que hubiera un mayor patrocinio empresarial.

«Esperamos que la reunión de la Comisión Interinstitucional se produzca en un futuro cercano, pero, mientras tanto, nosotros no nos rendimos y vamos a trabajar con nuestra propia comisión para que cuando aquella se vuelva a convocar tengamos una gran cantidad de proyectos interesantes, maduros y debatidos que presentar», añadió.

Comisión interna y propia, por tanto, que sigue la senda marcada por la Oficina del VIII Centenario que presidió hasta hace unos meses el catedrático de Derecho del Trabajo, Carlos Palomeque. Y comisión abierta, como la definió Ruipérez, que pidió que nadie se considerara excluido de la misma. «Están todos los que son, pero no son todos los que están», dijo, para dejar claro que, pese a que en este órgano hay personas de todos los ámbitos de la sociedad y de todas las facultades, «puede ampliarse en cualquier mome nto con aquellas personas que interés en trabajar». La comisión asesora es, por lo tanto, un mecanismo de canalizar proyectos «de abajo a arriba», ya que sus integrantes serán las «antenas» de la Usal en sus diferentes centros.

Diversos objetivos

Los objetivos de esta comisión se definen a través de los intereses prioritarios de la institución académica para el futuro, como señaló por su parte el vicerrector de Promoción y Coordinación, José Ángel Domínguez. En primer lugar, la internacionalización de la Universidad, para conseguir reforzar la proyección tanto de la oferta docente como de los grupos de investigación. Sin olvidar seguir avanzando en la innovación y transferencia, «como fuente de riqueza para la sociedad», y atraer talento emprendedor, así como apostar por programas docentes, investigadores y de gestión. Por último y no menos importante, avanzar en la captación de recursos.

Y es que VIII Centenario va mucho más allá de un simple cumpleaños. La Universidad de Salamanca quiere que sea un punto de inflexión de su transformación total de cara al futuro, y sobre todo, que se celebre a nivel nacional como el VIII Centenario también de la educación superior en España, que marcó el inicio del espacio latinoamericano del conocimiento. Por todo ello, confirmó el rector, Salamanca quiere acoger en ese 2018 una reunión del Espacio Europeo de Estudios Superiores, lo que implicaría asumir la secretaría técnica del grupo de seguimiento del proceso de Bolonia y contar con «una gran influencia en la generación de un espacio latinoamericano y europeo de educación superior», añadió Hernández Ruipérez, que ya ha solicitado por carta este proyecto concreto al Gobierno.

Asimismo, la Universidad de Salamanca quiere albergar en ese 2018 una conferencia de la Unesco sobre Educación Superior, en torno al día internacional de este ámbito académico, que se sumaría al evento que ya está confirmado, la reunión de rectores de Universia, en la que se espera la presencia de 1.700 líderes universitarios de todo el mundo.

Otra línea de celebración en la que trabajará la Comisión Asesora será, por supuesto, la propia conmemoración de la Universidad, para lo que se buscará que sea sede o subsede de organismos de referencia internacional, se crearán los Premios Internacionales Universidad de Salamanca y se fomentará la mejora y nueva creación de las instalaciones e infraestructuras de docencia, investigación y transferencia. Asimismo, será una celebración «del saber», en la que se destacará el protagonismo de la Universidad en materias como la enseñanza del español, los valores democráticos, la investigación biosanitaria y la ciencia y tecnología.

Por último, otro ámbito de celebración serán las ciudades mismas que albergan los campus de la institución académica. No sólo Salamanca, sino también Ávila, Zamora y Béjar.

Mejor con apoyo

Todo este programa de objetivos tendría más futuro si la Universidad contara con apoyo externo. Así lo reconoció el rector, que dijo haber recibido «respuestas corteses pero que dilatan el proceso» a sus múltilples reclamaciones. «Al no convocar la Comisión el Gobierno no sólo desoye a la Usal sino también al Consejo de Universidades a nivel nacional, al Ayuntamiento y Diputación de Salamanca y a las Cortes de Castilla y León», recordó Hernández Ruipérez. «De todos modos, aunque sería más fácil con apoyo, vamos a seguir adelante, porque la Universidad de Salamanca es capaz por si sola de generar grandes proyectos y eventos», concluyó.