Sancionan a un inocente en el caso Vinicius de Valladolid por una mala identificación
Expediente disciplinario ·
El club reconoce «el error» y levanta el veto al socio, que podrá regresar al estadio y a quien se abonarán los partidos a los que no ha podido asistir esta temporadaUno de los socios expedientados y sancionados por el Real Valladolid a raíz de los insultos y lanzamiento de objetos a Vinicius JR en el ... partido del 30 de diciembre entre el Real Valladolid y el Real Madrid era inocente: se equivocaron en la identificación y el visionado de las grabaciones de las cámaras de seguridad lo ha podido probar: era otra persona la que ocupaba su asiento. Así lo ha reconocido el club en una resolución a la que ha tenido acceso El Norte de Castilla en la que se estima íntegramente el recurso formulado por el socio, Carlos T. S., y «se dejan sin efecto todas las medidas disciplinarias adoptadas en su día, con carácter inmediato».
Publicidad
Esta resolución, firmada por Matthieu André Jacques Fenaert, consejero delegado del Real Valladolid CF, que está fechada el 29 de marzo pasado pero que ha sido notificada a finales de la pasada semana por los abogados del socio sancionado, establece también que, en compensación por todos los partidos a los que se le prohibió asistir durante la tramitación del expediente disciplinario, el club «le repondrá en el perjuicio económico sufrido, equivalente al importe de la parte proporcional del abono por los partidos a los que no ha podido asistir».
El pasado 7 de marzo, el club inició expediente disciplinario contra Carlos T. S., por considerarle autor del lanzamiento de dos objetos al terreno de juego sin impactar contra el jugador del Real Madrid Vinicius José Paixao de Oliveira durante el partido del 30 de diciembre en el Zorrilla, correspondiente a la jornada 15 de LaLiga. Una vez tramitado dicho expediente, el Órgano de Disciplina Social (ODS) del club decidió sancionar al abonado veinteañero con la prohibición de acceder a las instalaciones deportivas donde se celebraran acontecimientos o espectáculos deportivos gestionados por el Real Valladolid. Además se le castigó con la pérdida de la condición de abonado por tres años y medio, lo que equivale a tres temporadas y media. O, lo que es lo mismo, puntualizaba el expediente sancionador, hasta el inicio de la temporada 2027-2028. Perdía también el importe económico del precio del abono y no podría renovar el contrato tampoco.
Queda pendiente la resolución definitiva de la multa de 4.000 euros impuesta por la Delegación del Gobierno, basada en esa misma identificación
El Real Valladolid se justifica en que basó su decisión en la identificación facilitada por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, «actuando en todo caso bajo la cobertura legal que le otorga la presunción de veracidad a esta evidencia».
Publicidad
El 24 de marzo pasado, los abogados del sancionado, Jaime del Pozo y Rubén Redondo, presentaron un escrito de alegaciones en el que las fotografías aportadas dejaban claro, sin lugar a dudas, que en el asiento de su defendido había otra persona. ¿Qué había pasado? Que la fotografía del DNI de Carlos T. S., bastante antigua, y la fisonomía del ocupante ocasional de su sitio en la grada y presunto infractor eran muy parecidas, lo que pudo llevar a error en la identificación a la Policía.
Con barba
El presunto infractor ocupaba el asiento asociado al abono que le corresponde a Carlos, pero durante todo ese partido, este estuvo situado con varios conocidos gradas más arriba de la suya, en otra zona del mismo sector «de pie justo detrás del palo izquierdo del fondo norte», explica el sancionado en su escrito de alegaciones. Cuatro personas pueden corroborarlo. Para mayor evidencia, indica, aporta una fotografía suya que se realizó durante esa Nochevieja, es decir, un día después del partido, con barba poblada de bastante tiempo, mientras que el joven que ocupaba su asiento está perfetamente rasurado. En lo único que se parecen, subraya, es que ambos llevan gafas.
Publicidad
Con esta resolución, en la que el Real Valladolid exonera a este socio de cualquier responsabilidad en los insultos y lanzamiento de objetos a Vinicius, no termina la batalla de Carlos y su familia para demostrar su inocencia, pues les acaba de llegar, por otra vía, la sanción de 4.000 euros de multa de la Delegación del Gobierno, que también han recurrido. Confían en que, como el club ha admitido el error de identificación, este sea argumento más que suficiente para que se le levante de inmediato esta otra sanción, que incluye también la prohibición de acudir a cualquier infraestructura deportiva.
«Sorprende ahora extremadamente que se inicie el presente expediente sancionador pretendiendo establecer una identificación errónea como cierta, sobre la única base de un pretendido criterio de infalibilidad de la Policía. Entendiendo que no se ha realizado ninguna otra comprobación adicional, con el presente escrito solicito expresamente la verificación de todas las alegaciones ahora formuladas por parte de la Policía a través del Coordinador de Seguridad», señala en su escrito de alegaciones, al que acompaña la resolución del club con el reconocimiento del error de identificación.
Publicidad
Pero mañana Carlos, al menos, podrá asistir al Zorrilla para presenciar el Real Valladolid-Barcelona, su primer partido después de meses de sanción.
3€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión