Los universitarios reclaman ampliar los horarios de las bibliotecas de Palencia

La biblioteca del campus de La Yutera permanece abierta para preparar exámenes desde el 17 de diciembre del año pasado al 11 de febrero de este durante todos los días, excepto festivos de 7:45 a 21:30 horas, mientras que la del Lecrác cuenta con un horario de 8 a 22 horas de lunes a viernes, los sábados se puede utilizar de 9 a 14 horas y de 17 a 22 horas, y los domingos solamente de 10 a 14 horas.

El descontento de gran parte de los universitarios respecto a los horarios de este servicio en Palencia se ha hecho notable con varias quejas a la Universidad de Valladolid, pese a que hasta el momento nada ha cambiado desde que se reabrieran estas bibliotecas después de la pandemia. Y es que antes de la llegada de la covid, en época de exámenes, podían llegar a estar abiertas incluso las 24 horas del día.

Las largas colas para conseguir un sitio continúan siendo diarias y se producen durante varios minutos antes de la apertura de las puertas de estos centros, para evitar quedarse fuera en los días previos a los exámenes, que además suelen coincidir en las mismas fechas para todos ellos, pese a estudiar diferentes grados universitarios.

La biblioteca del campus de La Yutera ha implementado desde el coronavirus también la necesidad de contar con el carnet de estudiante de la UVA o, en su defecto, solicitar el de antiguo estudiante para acceder a sus instalaciones, algo que no era necesario antes, según aseguran varios estudiantes. «Aquí en La Yutera, el fin de semana se llena entera. Han puesto una persona en la entrada para controlar el aforo y se encarga de verificar los carnet de la gente, solo dejan entrar alumnos o exalumnos de la UVA. Eso se ha implementado a partir de la covid», reconoce Sergio Estébanez estudiante del Programa de Grado de Estudios Agrícolas e Industriales.

«Desde la pandemia, hemos intentado hablar mucho con la vicerrectora porque antes en periodo de exámenes abría 24 horas, lo que nos venía muy bien. A raíz de la pandemia, al implementarse el tema del personal, suponemos que el gasto era más grande y nos han reducido cada vez más la temporada de apertura», agrega.

Los estudiantes universitarios que acuden de forma habitual a ambas bibliotecas para preparar sus exámenes finales coinciden en que se han visto perjudicados por el recorte en las horas de apertura, además de resaltar que sus constantes intentos por contar en estas fechas con un horario nocturno continúan viéndose denegados desde la universidad. «Creo que es un servicio que escasea mucho, sobre todo para los fines de semana o en horario de noche en época de exámenes. Es algo que nos viene muy bien a todos, ya no es que tengamos una biblioteca durante las 24 horas, es que no hay un centro que abra al menos hasta las dos de la mañana, y es algo que demandamos», advierte Rebeca Martínez, estudiante de Enfermería.

«Alguna vez se ha quedado gente fuera en plena época de exámenes y es algo que da mucha rabia. El año pasado en la biblioteca de La Yutera sí que teníamos servicio hasta las dos de la mañana y, de repente, lo quitaron. No entendemos muy bien el por qué, lo reclamamos, pero no hemos conseguido nada», añade Martínez.

Quedarse en casa

Los propios estudiantes universitarios aseguran que la reducción de horarios ha provocado que muchos de ellos opten por quedarse en casa y estudiar sin límite horario y sin tener que parar cuando cierran las instalaciones. «La excusa que han utilizado ha sido la pandemia para recortar horarios. El año pasado podíamos estar estudiando hasta las dos de la mañana y ahora cierran a las diez. Al reducir los horarios, viene menos gente y al final también lo utilizan como excusa. Creemos que es un servicio que no les supone un gasto tan importante y que es necesario», opina, por su parte, Javier Morcuende estudiante de doble grado de Ingeniería Agrícola y Forestal.

«Algunos compatibilizamos estudiar con un trabajo, entonces en las horas que abre la biblioteca no podemos venir, por eso necesitamos poder estudiar aquí en horas menos usuales como puede ser por las noches», argumenta Morcuende.

La ubicación de ambas bibliotecas universitarias en la ciudad es otro punto de conflicto, ya que los estudiantes aseguran que existe mucha demanda para disfrutar de este servicio y que no existe ninguna biblioteca en el centro. «Los horarios es verdad que se quedan algo escasos para poder venir cuando quieras y los domingos solamente abren por la mañana, entonces todos vamos a la de La Yutera. », asegura Mónica Lara, alumna de Ingeniería de Diseño, sobre la biblioteca del Lecrác. «A lo mejor deberíamos tener sitios un poco más en el centro y que no fuesen solo para universitarios», concluye la estudiante.