La Diócesis Palencia reúne a más de 300 fieles en el seminario menor

Mas de 300 católicos palentinos –inicialmente se habían inscrito 250– se han reunido este sábado en el seminario menor para participar en un inédito Encuentro Diocesano en el que se intercambiaron experiencias, se debatió sobre aspectos del Plan Pastoral Diocesano y se insistió en la formación. De Hecho, la reunión constituyó el punto de partida del relanzamiento de la Escuela Diocesana de Formación, que lleva muchos años presente en la Diócesis y que ahora se quiere potenciar. Al encuentro asistieron sacerdotes diocesanos, religiosos, monjas y sobre todo seglares, más del 85%, entre voluntarios, catequistas, miembros de consejos parroquiales, de movimientos apostólicos, de Manos Unidas y Cáritas, entre otros.

El obispo de Palencia, Manuel Herrero, destacó que uno de los objetivos del encuentro es «sentir la experiencia de ser iglesia». «La iglesia no la forman las piedras o las ladrillos, sino las personas, que se encuentran y comparten la fe, la esperanza y la caridad», agregó. El prelado añadió que estos encuentros permiten concluir «que no estamos solos en el mismo empeño, en misma la barca, en la misma tarea, y eso alienta y anima».

Asimismo, Herrero aseveró que este encuentro «significa que estamos en el camino recto, porque donde dos o tres se reúnen en nombre de Jesús ahí está él en medio, por tanto no estamos desencaminados, sino guiados por él». Otro objetivo de este encuentro es «compartir la vida, la experiencia y el trabajo apostólico». Asimismo, abogó por «tomar conciencia de por dónde vamos y dónde queremos ir todos juntos, y ayudarnos unos a otro a caminar por ese espacio, todo esto en un clima de alegría y fraternidad que debe caracterizar todo lo que vive la iglesia».

El vicario de Pastoral, Miguel Pérez, añadió que los ocho talleres que se desarrollaron a lo largo de la jornada constituyen el deseo de formación, que es necesaria. «En épocas de tantos cambios, cuantos más nos formemos, aprendamos y conozcamos la realidad y el Evangelio, mejor lo vamos a hacer», aseguró.

Los responsables de la Diócesis destacaron la alta convocatoria que ha tenido este novedoso encuentro diocesano y el perfil joven de muchos de sus asistentes. Belén Román, catequista de San Miguel y secretaria del Consejo Pastoral Diocesano, reconoció que le ha sorprendido «el elevado número de participantes y sobre todo la motivación con la que vienen, las ganas de compartir y de vivir este encuentro». En este sentido, Miguel Pérez añadió que los fieles quieren encontrarse, «y cuando hay propuestas y formatos que son interesantes, entran».

El vicario general de la Diócesis, Anastasio González, sobre el encuentro diocesano, recordó que en los arciprestazgos sí se organizan encuentros de zona –algunos desde hace más de treinta años–. «Esto es como un paso más de esa experiencia de encuentros eclesiales que hay en los arciprestazgos y que se celebran todos los años», aseveró.

Miguel Pérez señaló que los ocho talleres organizados ayer responden a propuestas del Centro Diocesano de Formación para alcanzar una «formación integral». El centro incidirá en la familia, el conocimiento del Evangelio, la doctrina social de la iglesia, nuevas metodologías para la educación cristiana dirigidas a niños y adultos, la innovación, la oración, la liturgia y el papel de los laicos en la misma, cada vez más presente en el medio rural.