La ARMH descarta que los huesos hallados en la provincia de Palencia daten de la Guerra Civil

El hallazgo el pasado viernes de restos humanos en un antiguo corral de Villaviudas parece corresponder a un antiguo asentamiento, posiblemente de origen medieval, tal y como indicó ayer el presidente provincial de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), José Luis Posadas. «Por esa zona se suelen encontrar restos con relativa frecuencia y no corresponden con represaliados de la Guerra Civil», apuntó Posadas poco antes de explicar que el lugar en el que se encontraron los tres cráneos y diferentes huesos humanos era hace años un estercolero. «Ahí había ganado y la gente se fue llevando los excrementos de los animales para abonar las tierras y cuando han llegado a la parte de abajo han aflorado estos huesos», explicó.

La arqueóloga que trabaja para la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, Almudena García Rubio, estuvo analizando hace ya años las inmediaciones de la zona en la que se han encontrado ahora los restos humanos y consideró que los huesos que afloraron en aquel momento eran restos, probablemente medievales, por lo que Posadas concluye que el hallazgo actual «casi con toda seguridad» está íntimamente relacionado al que estudió la ARMH en aquel momento.

El hallazgo de la semana pasada es el segundo de características similares que se da en la provincia este mes. El primero de ellos fue en una tierra entre La Miranda y la zona denominada como Santa Eufemia, donde un transeúnte encontró el viernes 18 lo que parece ser un cementerio medieval. Con respecto a este primer hallazgo, la Junta está adoptando las primeras medidas para incluirlo en el inventario de bienes arqueológicos de Palencia, que es una forma de protegerlo.

El paso inicial para que el cementerio sea incluido en el inventario es el de documentación, para lo que la Junta piensa, a instancias de la Dirección General de Patrimonio, contratar una empresa que se encargue de esta labor. Con la meta de preservar las lápidas halladas, y alguna más que pudiera permanecer bajo tierra, la Junta ha procedido a solicitar el propietario de la tierra –que según fuentes de la institución regional es el Ayuntamiento de Palencia– que cesen las actuaciones de allanamiento del terreno que se estaban realizando y que hicieron aflorar los restos que un vecino descubrió durante un paseo.