Estampas de una alerta climática

En la exposición 'El jinete amarillo', acompaña con imágenes tomadas a lo largo de tres décadas algunos de los fragmentos más representativos de la obra 'Un mundo que agoniza' (1975) del escritor Miguel Delibes. Este texto recoge su discurso de ingreso en la Real Academia Española hace ya 45 años, sin embargo, Raso considera que las palabras del vallisoletano están más vigentes que nunca.

Ambos comparten esa sensibilidad hacia un planeta cada vez más maltratado. Por eso, aprovechando el centenario del nacimiento de Delibes, el fotoperiodista ha querido homenajearle con una exposición que se inaugura el sábado 29 y que podrá visitarse hasta el 1 de abril en el Centro e-LEA de la Villa del Libro (Urueña). En ella se reflejan algunos de los principales problemas como los movimientos migratorios, la contaminación, la despoblación del medio rural, fenómenos climáticos devastadores o la obsolescencia programada.

En una de las fotografías se ve a un hombre echando combustible en un vehículo con un cubo. Está tomada en Moscú durante las primeras elecciones democráticas de Rusia y pretende alertar sobre el agotamiento de los hidrocarburos a nivel mundial. Raso advierte de que «el abuso de combustibles fósiles es un problema global y su extinción generará una situación de debilidad del ser humano».

Otra de las más imágenes la hizo en un centro de acogida del estado indio de Karnataka. Aparecen niños con diferentes deformidades físicas y con ella, pretende concienciar sobre las consecuencias genéticas de la contaminación, pero también de las desigualdades existentes en diferentes partes del mundo. Sobre la situación de los mares y los vertidos en espacios naturales hay varias instantáneas, en una de ellas, se puede ver a varios hombres recogiendo hidrocarburos y otros residuos en la costa de Ceuta. «El Estrecho de Gibraltar es uno de los que más actividad tienen del mundo, pero la falta de conciencia lo convierte en un lugar muy frágil», asevera.

Entre las 53 fotografías, tanto en blanco y negro como en color, hay algunas más amables que muestran la belleza de los bucólicos paisajes castellanos o de una manada de leonas en Masai Mara (Kenia). «Seleccionar las imágenes que mejor retratan los fragmentos del texto no ha sido fácil, a pesar de que Delibes es muy claro y aporta gran cantidad de datos». La clave está, según explica, en escoger fotos documentales con significado, pero que dejen un resquicio a la esperanza. «Son imágenes impactantes, la mayoría de ellas ya publicadas en diversos medios de comunicación, pero no especialmente dramáticas, por lo que es una exposición para todos los públicos», subraya.

Fidel Raso, galardonado con el Premio Internacional de Periodismo Manuel Leguineche, ha sido enviado especial en la caída del Muro de Berlín o la Primera Guerra del Golfo. También ha trabajado en India, Canadá o Ecuador y ha atravesado África desde Libia a Sudáfrica pasando por campos de refugiados y zonas de conflicto. En definitiva, Una extensa trayectoria profesional que le ha permitido corroborar muchas de las predicciones de Miguel Delibes.

A su juicio, Delibes, quien fue director de El Norte de Castilla, «era un visionario con grandes conocimientos del entorno» y 'Un mundo que agoniza' es, a su juicio, una crónica que se adelanta a su tiempo. En este sentido, afirma que hemos llegado a un punto en el que «la Tierra nos expulsa» y para frenar la cuenta atrás que ha iniciado la naturaleza ve vital cambiar las pautas de consumo y de explotación de los recursos.

Eso sí, asegura que para tomar acción se requiere el consenso a nivel mundial. «Hay que despertar conciencias y exigir a los líderes que se pongan de acuerdo. Sin embargo, este no es solo un problema político, por lo que la sociedad tiene que estar unida y actuar con determinación ante las discrepancias. No es una lucha a favor de un país o comunidad, sino para salvar el planeta».

Momentos cotidianos inmortalizados que invitan a reflexionar en una muestra sobre la posibilidad de un mundo mejor porque tal y como dijo Delibes «Todo cuanto sea conservar el medio es progresar; todo lo que signifique alterarlo esencialmente, es retroceder».