Castilla y León

Tudanca se abstiene en las Cortes y pone a Mañueco en el brete de presentar presupuesto

Ese es el escenario que abre una votación en la que el límite de gasto contó con los síes de los 31 procuradores del PP, los 20 noes de los 13 de Vox, los seis de UPL y Soria ¡YA! y el de Unidas-Podemos, y 30 abstenciones del PSOE, Por Ávila y el ex de Cs. El voto en blanco que permite que avance la tramitación de las cuentas deja en manos de Mañueco presentar ese presupuesto autonómico, entre augurios desde la bancada de la oposición de que el líder de los populares iba de farol con su anteproyecto.

«Han echado un órdago con las cartas marcadas» y por interés «electoral», aseguró la socialista Rosa Rubio, respecto al anteproyecto de cuentas para 2025 que el popular presentó a mediados de octubre en la sede de la Junta, como se hacía habitualmente con los proyectos aprobados que se enviaban a las Cortes, pero sin que en esta ocasión hubiera pasado por el Consejo de Gobierno. «Si no quiere quedar por mentiroso, apruébelo mañana mismo... No vamos a ser nosotros quienes frenemos estos presupuestos», retó la parlamentaria del PSOE, frente a un escenario alternativo en el que la falta de cuentas podría servir de argumento al PP para adelantar elecciones.

Carlos Fernández Carriedo, consejero de Economía y Hacienda, había defendido minutos antes el rigor técnico con que habían elaborado el proyecto del límite de gasto no financiero, con unas previsiones de ingresos, creación de empleo y deuda pública avaladas por la Airef (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal), y recalcó la intención de los populares de negociar sobre el anteproyecto de cuentas. «Vamos a hacer todo lo posible por lograr un acuerdo», prometió Carriedo. La tarde del martes, tras el anuncio de abstención de los socialistas, Fernández Mañueco apostó por cerrar esos apoyos a las cuentas, no en las Cortes con la tramitación oficial, sino antes. Y eso ha generado desconfianza en el hemiciclo.

«El techo de gasto va a salir adelante, lo que queremos es que no haya espantadas posteriores», resumió Pedro Pascual, de Por Ávila. Los partidos que optaron por la abstención este miércoles conminan al Gobierno en minoría del PP a registrar en las Cortes el proyecto de presupuestos y negociar allí las enmiendas para buscar apoyos. Francisco Igea, exvicepresidente de la Junta, defendió que la tramitación en el parlamento garantiza una negociación limpia, «con luz y taquígrafos», de un presupuesto autonómico que tal y como fue presentado por el presidente de la Junta, sin aprobar y como un anteproyecto, es «bulo y propaganda», a juicio del parlamentario del Grupo Mixto.

La oposición más frontal al PP en la parte los escaños en los que se apretó el botón rojo del voto en contra al techo de gasto para 2025 fue de Vox, sus compañeros en la Junta hasta julio. «Están gobernando en minoría», recordó Carlos Menéndez a la bancada popular. El procurador al que Juan García-Gallardo, tras dejar de ser vicepresidente autonómico, relevó como portavoz en las Cortes acusó a Alfonso Fernández Mañueco de promover «una pantomima y un circo» con un debate presupuestario engañoso, sin voluntad real de sacar adelante las cuentas. Recordó que los dirigentes populares llamaron con insistencia a los de Vox para garantizarse su apoyo tras las elecciones de febrero de 2022, por el interés en seguir en la Junta, algo que ahora no ocurre. Menéndez afeó a Mañueco que haya dinamitado en Castilla y León los puentes de diálogo con Vox que sí mantienen los populares en otros territorios.

Los caminos que culminan en las votaciones parlamentarias son tortuosos y en esa oposición al techo de gasto, que habría dado carpetazo al presupuesto de 2025, confluyeron junto a los ultraconservadores de Abascal, los parlamentarios de UPL y Soria ¡YA! y el de Unidas-Podemos. El soriano Ángel Ceña lamentó la estrategia que había puesto en marcha el PP, sin interés en negociar. «Para marearnos», describió el parlamentario de Soria ¡Ya!, quien no obstante anunció que mantienen «la puerta abierta» para mejorar un proyecto de cuentas «muy decepcionante» para su provincia. Siempre, remarcó, que Mañueco dé el paso de iniciar la tramitación en las Cortes.

Algo que es muy dudoso para Pablo Fernández, de Unidas Podemos. «No deseaban lo que va a acaecer hoy aquí», espetó el morado al consejero de Economía y Hacienda, en referencia al efecto de la abstención del PSOE. «¿Qué pasa ahora, señor Carriedo?», ironizó el procurador de Unidas-Podemos, asegurando que las «caras» de los populares cuando Tudanca anunció que podrían presentar presupuestos para 2025 eran «un poema». Él votó no.

A partir de aquí, tanto los exsocios de Vox como el resto de la oposición afilan el lápiz de redactar enmiendas y la calculadora para cambiar partidas de gasto. Por lo que pueda pasar. Los primeros insisten en recortar programas del Diálogo Social y los que fomentan «el asentamiento y reparto de ilegales», en referencia a personas inmigrantes sin papeles. Por Ávila, Soria ¡Ya! y UPL ponen la mira en proyectos incumplidos en esas provincias y el refuerzo de la inversión. La socialista Rosa Rubio tiró de lista y citó, entre otros, un plan de lucha contra la listas de espera sanitarias, plazas públicas de residencias de mayores, gratuidad de libros y material escolar. el blindaje de las VPO o la ley LGTBI+, atascada desde el último mandato de Juan Vicente Herrera.

Cerró el debate Rosa Esteban, por el PP, que demandó «gallardía para tomar decisiones en beneficio de todos y no sólo regalar el oído de los que creen que les votan». Un mensaje en genérico, pero con destino a la bancada de Vox. O eso parecía. A esas alturas entraba en el hemiciclo, para votar, el presidente Alfonso Fernández Mañueco, ausente durante todo el debate sobre un punto vital para iniciar la tramitación del presupuesto autonómico para 2025. La abstención socialista deja es decisión ahora, exclusivamente, en manos del dirigente del PP.