Pedrosa evita el pánico

Era muy indicativo ver al final del encuentro a integrantes de la delegación granjeña haciéndose fotos en el césped de La Balastera, un señor campo para la categoría, casi el Bernabéu para los equipos del grupo. La Granja venía este domingo a disfrutar del fútbol en Palencia, a pisar la hierba sin angosturas ni estrecheces por la clasificación, salvado como está el equipo de Javier Jadraque. Esa falta de presión está en las antípodas de su rival, el Danisa Cristo Atlético, que juega sin detenerse a mirar ni las señeras torretas de luz ni la capacidad de las gradas (aunque los asientos estén más vacíos que la Calle Mayor un lunes a las 22:00 horas). No puede disfrutar de su campo, solo quiere hacer uso de él como fortín para evitar que vuelen puntos que valen ahora un potosí en la lucha por evitar bajar a Regional. Este domingo, a punto estuvieron de hacerlo dos de los tres en juego, pero Juan Pedrosa, el suplente que tuvo su día de gloria, lo impidió con un remate de cabeza en el minuto 83 que evitó un ataque de pánico en el Cristo, con el Santa Marta y el Becerril ganando y el Unami arrastrado a las puertas del descenso. Algo esto último que, escuchando a Jadraque, no les debe importar mucho a los granjeños.

El Cristo Atlético salió sabiendo lo que tenía que hacer ante un rival que venía relajado, de domingo, pero que sabe a lo que juega visto cómo marcha en la tabla. Los de César Díez presionaron de inicio a los de Javier Jadraque, con Javichi como primer perro de presa. Acumularon de esta forma oportunidades por medio de Conde, Remus y Javichi, quien en el minuto 21 disparó dentro del área obligando a Yiyo a un buen rechace a córner. Un minuto más tarde, en el 22, Ricardo, el ex del Becerril, le quiso echar una mano a su antiguo equipo y porfió con Calleja por un balón hasta que se le robó, y gracias que se escoró demasiado y su tiro no cogió puerta. Una advertencia de los segovianos, que disfrutaban de La Balastera pero no venían de visita turística.

Entendió el Cristo el mensaje de La Granja, y Calleja, en el minuto 31, aprovechó un córner a favor de su equipo para rematar dos veces, la primera sin éxito y la segunda con el balón en el fondo de la portería. Los de César Díez lograban su fin, un tanto con el que sosegarse, pero los granjeños no querían ser vergel ni balneario. Quique lo dejó claro en el minuto 37, cuando tras una gran combinación de la delantera roja, acertaba a batir a Pedro.

Así acabó la primera parte, con La Granja contrarrestando el empuje inicial del Cristo Atlético, que ante las bajas de Charly, Mario y Hompy, formó con un centro del campo de lo más defensivo, con Castrillo y Luis Cuenca, central y lateral, como los dos pivotes. Nada que ver con lo que ofrecía Guillermo, un jugador que hacía suyo el medio del terreno de juego con su salida de balón. Y en la reanudación, el conjunto segoviano siguió a lo mismo, pese a que Noel, en el minuto 49, pudo marcar el 2-1 en un remate en plancha de cabeza que mandó fuera.

César Díez movió minutos más tarde el banquillo, y los cambios le vinieron muy bien a su equipo, que con Adri primero, y después con Juan Pedrosa, revolucionaron el ataque local. El Cristo Atlético se volcó en pos del gol, llegando por momentos a acumular cuatro hombres arriba (Mikel, Noel, Conde y Adri), pero los minutos pasaban muy rápido sin que se moviera el marcador. Hasta que en el minuto 83, un centro de Conde lo remató a gol Juan Pedrosa para alivio de la afición del Cristo, que anda muy necesitada de lexatines. Ellos no quieren hacerse fotos en otros campos, solo un 'selfie' en la última jornada en el vestuario, en gayumbos y pasados por la ducha celebrando la ansiada salvación.