Vargas Llosa respalda en Toro las celebraciones taurinas, que califica como "una fiesta importante y una tradición que debemos defender"

El Premio Nobel de Literatura 2010, Mario Vargas Llosa, fue recibido hoy con todos los honores en la ciudad zamorana de Toro, que estos días celebra su tradicional Fiesta de la Vendimia. El autor de 'La ciudad y los perros' recibió el cariñoso tributo del municipio por su encendida defensa del mundo taurino a lo largo de toda su vida, así como por su respaldo a la petición de que los toros sean declarados patrimonio cultural inmaterial por la Unesco. Los toros son una fiesta importante y una tradición que debemos defender con claridad y sin complejos de inferioridad, sentenció el autor de 'La ciudad y los perros' a su llegada a la localidad.

Siempre he defendido los toros porque hay una ofensiva contra ellos, con campañas orquestadas que en muchos casos obedecen a motivos políticos, que no persiguen tanto la defensa de los animales como utilizar esa prohibición con fines políticos. Tengo la impresión de que es lo que ha pasado en Cataluña, por ejemplo. A algunos no les gusta la fiesta pero a nadie se le va a exigir que vaya a los toros si no quiere. Lo que queremos es que se reconozca nuestra libertad y derecho de ir a los toros, detalló.

Con exquisita puntualidad, mientras las campanas anunciaban las doce del mediodía, el escritor peruano descendió de un gran Audi blanco acompañado de su esposa y de una amiga del matrimonio, mientras la banda municipal comenzaba a tocar en señal de bienvenida. La Corporación municipal al completo, con el alcalde Jesús Sedano al frente, junto con toreros como los vallisoletanos Leandro y Joselillo, y autoridades de la fiesta como el presidente de la Asociación Internacional de Tauromaquia, Williams Cárdenas, recibieron con una enorme sonrisa de gratitud al narrador, mientras los toresanos rompían en aplausos.

El exiguo recorrido desde la plaza de Santa Marina hasta el Ayuntamiento, recorriendo la calle Puerta del Mercado, se demoró notablemente ante la multitud de vecinos que se acercaban para solicitar firmas de muchos de sus libros, o para retratarle en la localidad zamorana. Una vez en el Consistorio, firmó el libro de visitas con la siguiente dedicatoria: Me siento feliz y muy honrado con esta visita a la ciudad de Toro, que conserva con tanto cuidado su hermoso patrimonio arquitectónico y su rica tradición cultural y hago votos por su éxito y prosperidad.

Tiempo de unidad

Vivimos tiempos en que se miran de perfil muchas cosas, pero Mario Vargas Llosa ha defendido siempre nuestras raíces más profundas y nuestras tradiciones con claridad, exhortó el alcalde del municipio. Así, recordó que Toro es una ciudad pequeña, pero el 1 de marzo de 1476 aquí se libró una batalla entre las tropas de Isabel y las de Juana la Beltraneja, tras la cual se consolidó la unidad de España.

En ese sentido, Vargas Llosa recalcó posteriormente que la unidad de España va a salir fortalecida de la prueba que ahora está viviendo. España es una unidad que tiene un peso histórico y cultural muy grande. A lo largo de su historia esa unidad siempre ha estado soportando pruebas y ésta será una más, pero creo que esa unión sólo puede fortalecerse en esta época en que justamente las pequeñas naciones cada vez tienen menos posibilidades de competir airosamente en un mundo globalizado, argumentó.

Tras alabar los vinos de Toro (puedo decir cosas muy buenas sobre los vinos de esta tierra, porque los conozco bastante bien y los aprecio mucho, cada día ganan más prestigio en todo el mundo, subrayó), el Premio Nobel se refirió a los momentos muy difíciles que viven los ciudadanos debido a una situación económica que está golpeando muchísimo a España, Portugal, Grecia o Irlanda. Europa es una realidad que ha traído ya beneficios muy grandes a todos los países que la integran, y desde luego también a España. La UE acaba de recibir el Premio Nobel de la paz porque ya en su corta existencia ha dado pruebas de los beneficios que conlleva la construcción europea. Es un continente que en su pasado no ha conocido un periodo tan grande de convivencia pacífica, y es una realidad económica que favorece a cuantos forman parte de ella, porque les abre mercados y les permite atraer capitales. Hay muchas razones para afrontar esta época difícil con la seguridad de que esos obstáculos van a ser vencidos y Europa va a salir adelante, y España desde luego va también a salir airosa de esta prueba difícil que está pasando, animó.

Defensor de la fiesta

Desde el Foro Taurino de Zamora, que apoyó desde el primer momento la invitación cursada al escritor peruano, recalcaron que hoy la afición de toda la provincia de Zamora vive un día histórico, y agradecieron desde el corazón la defensa abierta y elegante que el autor de 'Los cachorros' ha hecho siempre del mundo taurino. Tenerle hoy aquí, con nosotros, es un sueño, un milagro hecho realidad. Por ello le proclamamos triunfador absoluto de las Fiestas de la Vendimia, destacaron.

Por su parte, Williams Cárdenas agradeció a Vargas Llosa los constantes gestos de cariño y respeto lanzados por el peruano al mundo taurino, como fotografiarse montera en mano antes de recibir el Premio Nobel en Estocolmo, suscribir manifiestos de apoyo internacionales, o debatir en los medios de comunicación con aquellos que atacan a la tauromaquia. Por ello, se refirió a él como el más elocuente y eficaz defensor de la fiesta en todo el mundo.

Puesto en pie, Vargas Llosa se dirigió al auditorio presente en el Salón de Plenos del Ayuntamiento para resaltar que los toros representan profundamente la esencia de nuestra cultura, y han sido una fuente riquísima de inspiración pata las artes y las letras españolas, un idioma que hoy hablan más de 500 millones de personas en todo el mundo.

Los toros, en su opinión, son algo muy profundo que ha arraigado en todas las manifestaciones artísticas. Además, rebatió a los antitaurinos asegurando que el toro bravo existe porque existe la fiesta de los toros, y acusó a quienes pretenden la desaparición de la fiesta de pretender con ello la desaparición del toro bravo, un hermosísimo animal que está tremendamente protegido y respetado gracias a la propia fiesta.

Somos millones de aficionados en todo el mundo y la fiesta está absolutamente viva. La afición sigue creciendo. Ahora vivimos tiempos difíciles, con un porvenir lleno de desafíos, pero contamos con importantes recursos contra las incertidumbres: la antigüedad de nuestra cultura y de nuestra historia nos da fortaleza, remató.

Tras mantener una reunión privada con representantes del Foro Taurino de Zamora, Vargas Llosa recorrió el casco histórico de la ciudad deteniéndose con especial interés en la Colegiata y en el mirador del Espolón, donde alabó las vistas de la Vega de Toro antes de recorrer el mercado medieval que estos días puebla los alrededores. A continuación participó en una comida celebrada en su honor, antes de acercarse ya por la tarde a la plaza de toros de la localidad, donde descubrió un azulejo conmemorativo de la visita. Antes de participar en la celebración de 'La Fuente del Vino' y una corrida de toros que arrancó a las seis de la tarde.