Una exposición de fotografías pone en valor el paisaje y el patrimonio de Villalón de Campos

Villalón de Campos presume del bello rollo gótico que en el siglo XVI mandase construir el Conde de Benavente, Rodrigo Alonso Pimentel, de los singulares soportales con techos que parecen antiguos artesonados, de las iglesias mudéjares de San Miguel y San Juan, de los tradicionales palomares, de sus fuentes o de sus inmensos paisajes terrecampicos con sus mil tonalidades estacionales. Ahora todos esos importantes elementos de su patrimonio artístico y natural se han convertido en el principal motivo de algunas de las 106 fotografías de la exposición 'El arte que me rodea', del villalonés Fernando Caballo Blanco, que acoge el Museo del Queso de la histórica villa del Alón hasta el 6 de enero, en horario, de viernes, de 18 a 19.30 horas; sábados, de 12 a 13,30 y de 18 a 19.30 horas, y domingos, de 12 a 13.30 horas.

El alcalde villalonés, José Ángel Alonso, y las concejalas Marta Maroto y Lorena Vegas, acompañaron al fotógrafo el domingo en la inauguración de una muestra de fotografías que «son unas pinceladas del patrimonio, la arquitectura popular, los paisajes terracampinos que rodean Villalón, que tanto me motivan, con las diferencias en cada estación, con las puestas de sol, y los cielos, siempre con nubes diferentes como mejor telón de fondo». Después de dar a conocer sus fotografías en las redes sociales, Caballo Blanco ha querido enseñarlas en un formato más tradicional, como ya hizo el pasado año en Tierra de Campo», su primera exposición con fotografías de la comarca.

La exposición tiene también su parte reivindicativa respecto a la iglesia de San Juan, que «de niños la hemos conocido abierta, y la vamos a ceder a otras generaciones cerrada, por eso hay que buscar la forma de que vuelva a abrir sus puertas». Reivindicación también para los tradicionales palomares, porque «una de la piezas singulares del paisaje terracampino no podemos dejar que se conviertan en tierra, hay que buscarles una nueva función, que bien puede ser la paisajística».

Caballo Blanco describe sus fotografías como «sentimentales, a la vez que sencillas y naturales, porque todo lo que están en ellas, está ahí fuera». Guitarrista y vocalista del grupo de música tradicional Los juglares del Alón, uno de sus fundadores en los años 80, este villalonés ha encontrado ahora en la fotografía una afición que «me aporta mucho, porque cuando doy un paseo con mi cámara y veo una luz especial, soy feliz».

La exposición ha contado con la colaboración del Ayuntamiento villalonés, cuya concejala de Cultura y Turismo, Lorena Vegas, señaló que «se trata de fomentar la cultura y apoyar a los artistas locales, que tenemos unos cuantos, y Fernando es uno de ellos». Vegas también destacó que «la muestra sirve para poner en valor nuestro patrimonio y el de la comarca». La exposición tiene apartados destinados a tradiciones tan singulares de la comarca como el Vítor de Mayorga y el paloteo de Villafrades de Campos, pero también a iniciativas tan especiales como la del pueblo palentino de Boadilla de Rioseco, en la que Antonio López ha cedido tres obras para su instalación en la galería al aire libre «Arte contra el olvido».

Caballo Blanco tiene claro que «la exposición no es sólo trabajo mío, es trabajo de mucha gente», por eso dedica un apartado de agradecimientos en el que escribe que «la gratitud equivale a una fotografía que no se borra en el tiempo». Por ahora, sus más de cien fotografías son un contante regalo a los visitantes a la exposición y una invitación a conocer la realidad de lo que cuenta en ellas.

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