Hallan una hembra de gamo muerta en un colchón en el centro de Zaratán

De camino al primer café de la mañana, un vecino se encontró un colchón tirado en mitad de la Plaza Mayor de Zaratán. Sobre él, un bulto. Al acercarse un poco más, pudo comprobar que se trataba de un ejemplar de gamo, una hembra, que había dejado un rastro de sangre en el colchón y en el suelo, como si alguien la hubiera arrastrado hasta allí. Fue otra vecina la que dio aviso a la Guardia Civil, que llegó al lugar a las 8:30 de la mañana. Se da la circunstancia, además, que el nuevo cuartel de la Benemérita se encuentra a apenas doscientos metros de donde se halló el cuerpo del animal.

La investigación del Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza) sigue abierta, y aún no se ha dictaminado si la muerte del animal fue accidental, debido a un atropello, por ejemplo, o a causa de algún disparo.

Técnicos del servicio de Medio Ambiente acudieron después hasta el lugar para retirar el cadáver del animal.

Por la apariencia del animal se habló, en principio, de una cierva. También se especuló con la posibilidad de que se tratara de una corza, mucho más común en el entorno de los montes Torozos. Expertos consultados por este periódico aseguran que se trata, sin embargo, de una hembra de gamo. Es una especie que se introdujo hace siglos en España para la caza, aunque no es habitual en esta zona. Las hembras, como la que se halló en Zaratán, alcanzan un peso de 30 a 60 kilos, con alturas a la cruz de 70 a 80 centímetros.

El periodo de caza en España para esta especie cinegética es entre octubre y marzo.

En otras provincias, como Soria o Zamora, son comunes los accidentes de tráfico en los que se ven involucrados corzos o jabalíes. Sin embargo, en caso de chocar con un animal el conductor del vehículo debería reclamar la presencia de la Guardia Civil para poder conseguir el parte que necesitará el seguro.

Fuentes de la Benemérita confirmaron que la investigación está en marcha, aunque no pudieron precisar si el animal presentaba algún impacto de escopeta, por ejemplo, o si se trataba de un atropello. Algo que se conocerá en las próximas horas, una vez que se esclarezca qué circunstancias llevaron a la hembra de gamo a acabar sus días en un colchón en pleno centro de Zaratán.