Castán propone abrir más la Cátedra de Cine a la ciudad aumentando las proyecciones

Su nombramiento coincide con el traslado de la Cátedra de Cine a otra planta del Edificio Rector Tejerina, la cuarta, «un lugar más amplio» en el que, incluso, «podremos tener una pequeña sala de proyecciones», afirma Javier Castán Lanaspa (Jaca, Huesca, 1958).

El nuevo director de la Cátedra de Cine de Valladolid sustituye a José Luis Cano de Gardoqui, que ha estado al frente desde 2008, y que hace dos meses presentó su dimisión por motivos personales. «Asumir la Cátedra de Cine significa prescindir de las vacaciones, ahora que el curso termina en julio y empieza en septiembre, y eso está en la raíz de la salida del antiguo director», confiesa Javier Castán, quien asume el cargo «con mucha ilusión».

El Curso de Cinematografía, que se celebra en el mes de agosto, es la principal actividad de la Cátedra, y lo seguirá siendo. «Tengo muchas ganas de hacer cosas nuevas pero manteniendo lo que se ha hecho hasta ahora», apostilla el nuevo director. «Tengo la responsabilidad de mantener e incrementar el nivel pero, lo que pueda o no pueda hacer, dependerá de los nuevos presupuestos».

Entre sus ideas, «proyectar cine a todas horas. La Cátedra tiene que abrirse mucho más a la ciudad». ¿Cómo? «Organizando ciclos y abriéndolos al público», sentencia Castán quien, además de las colaboraciones que la Cátedra mantiene con otras instituciones como la Casa de la India, la Fundación Jiménez-Arellano o el Teatro Calderón, está interesado en comenzar otras nuevas con otras cátedras universitarias como, por ejemplo, la Cátedra de Estudios de Género o el Observatorio de Derechos Humanos. «Sería muy interesante un ciclo de cine y mujeres», piensa en voz alta. «Ahora lo más importante es cerrar el año, ya veremos qué pasa el que viene».

Profesor de Teoría y Estética del Cine en la Universidad de Valladolid, José Luis Cano de Gardoqui García (Valladolid, 1958) abandona el puesto de director de la Cátedra de Cine con la seguridad de haber conseguido su objetivo: «consolidar la Cátedra como un referente de estudios de cine en el panorama español». «Se han hecho muchas actividades, ha aumentado el número de alumnos del Curso de Cinematografía y se ha dado a conocer mucho más de lo que ya se conocía», resume Cano de Gardoqui, quien abandona la dirección por motivos personales.

«Ha sido un período muy fructífero pero la Cátedra exige mucha dedicación y tienes los veranos hipotecados con el Curso de Cinematografía, además del resto de actividades del año». «Me resulta difícil compatibilizar la dirección de la Cátedra con las clases, la investigación y la familia», confiesa el hasta hace un par de meses máximo responsable de la entidad universitaria. «Javier y yo hicimos la carrera juntos y ahora somos compañeros de departamento. La relación es muy buena y hemos colaborado en muchos proyectos. Seguiré impartiendo mi asignatura de cine y ayudando», asegura Cano de Gardoqui.