Las bulas de San Esteban, de gran valor en el estudio de la imprenta
El conjunto, formado por 57 ejemplares, contiene gran riqueza de matices tipográficos e iconográficos
MÓNICA RICO
Viernes, 28 de enero 2011, 01:20
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Representantes del Ayuntamiento de Cuéllar y técnicos de la Fundación del Patrimonio Histórico de Castilla y león, comprobaron recientemente el resultado final del trabajo de recuperación del conjunto de bulas encontradas en la sepultura de Isabel de Zuazo, en la iglesia de San Esteban de la villa, durante su restauración, promovida por la Fundación del Patrimonio y llevada a cabo con la colaboración del Obispado de Segovia y el Consistorio local.
Cabe recordar que la excavación arqueológica de los sepulcros del presbiterio de este templo, supuso el descubrimiento de restos humanos momificados. Una de las momias, la de Isabel de Zuazo, abrazaba bajo el sudario un lote de documentos, que resultaron ser bulas de gran interés para el conocimiento de la historia de la imprenta en Castilla y León. El Centro de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de la Junta de Castilla y León asumió su recuperación y restauración, con el fin de garantizar la preservación de esta documentación inédita.
Desde el propio Centro destacaron la complejidad a la hora de llevar a cabo los tratamientos, que radicó especialmente en el avanzado estado de descomposición y fragmentación que presentaban los soportes, debido a las condiciones originarias del enterramiento. Desde un primer momento se priorizó el garantizar y salvaguardar la información contenida, por lo que fue necesaria la estabilización e individualización de cada uno de los documentos, que se encontraban formando un bloque fuertemente compactado y adherido entre sí.
Consulta y estudio
Se registraron, mediante escáner de alta resolución, cada uno de los documentos, para seguidamente poner a consulta y estudio su memorización y reproducción, llevado a cabo por un equipo de paleógrafos de la Universidad de Valladolid, encargados de realizar su identificación. Previamente fueron necesarias limpiezas y la unificación de fragmentos, que dieron como resultado un total de 57 ejemplares de bulas y un librito de oración impreso en latín.
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Todo este trabajo ha puesto de manifiesto la importancia de la documentación desde el punto de vista del desarrollo de la imprenta en Castilla y León. El conjunto está compuesto en su mayoría por impresiones incunables (realizadas antes del año 1500) y post-incunables (hasta 1520), que contienen una gran riqueza de matices tipográficos e iconográficos.
Su cronología abarca desde 1484 a 1539, habiendo bulas de Cruzada, de fábrica, de difuntos, hospitales y otras. Existen ejemplares aún no descritos en los catálogos y repertorios de 'incunabulística' española, lo que incrementa el valor del descubrimiento, puesto que testimonian la actividad todavía no conocida de algunos impresores en España y constituyen un importante repertorio en las escasas referencias de las conservadas hasta hoy.
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Uno de los trabajos finales con los documentos ha sido la elaboración de un montaje de conservación individual para cada uno de ellos, pensado para su adecuado almacenaje y con las condiciones óptimas para facilitar su localización, acceso, consulta y manipulación.
La Fundación del Patrimonio Histórico tiene previsto editar el contenido del trabajo de recuperación y revaloración del conjunto documental en una publicación monográfica de carácter científico.
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