Esplendor en cada etapa

La Junta ha invertido más de 170.000 euros en la restauración del templo de Cezura y en la mejora de su entorno a través de una intervención integral incluida en el Plan del Románico Norte y realizada por un equipo de profesionales de la Fundación Santa María la Real.

La intervención en la iglesia está muy ligada a las diferentes fases constructivas que se pueden apreciar en el edificio. En el siglo XII se levanta un pequeño templo románico, que sufre distintas ampliaciones y modificaciones hasta el siglo XVII, época en la que se construye la torre. De forma paralela, la recuperación del entorno permite mejorar su presencia.

La localidad de Cezura, situada a nueve kilómetros de Aguilar de Campoo, tiene en esta iglesia de Santiago Apóstol uno de los edificios más destacados y es uno de los muchos incluidos dentro del Plan de Intervención del Románico Norte.

En la cubierta del templo, afectada por humedades, se ha conservado la estructura, reemplazando las viguetas y la ripia. También se ha procedido a la restauración de las zonas más dañadas del suelo del pórtico. En el ábside se picaron los morteros de cementos y se rejuntaron todas las grietas mediante morteros de cal, y en la fachada norte se colocaron en su posición original los contrafuertes.

En la nave de la iglesia se han realizado diversas acciones para recuperar todo su esplendor. Así, en el exterior se procedió a la limpieza de los muros, mientras que en el interior se picó el mortero de cemento y se ejecutó un nuevo rejuntado de los sillares; se limpiaron los revestimientos de cal, con especial cuidado en las zonas que tenían pinturas murales, y se limpiaron y barnizaron los elementos que se conservaban.

La sacristía y la torre

Igualmente se encaló la sacristía y se restauró el coro, conservando en lo posible su estructura original. La torre campanario mostraba una serie de grietas y desplomes que requirieron de una intervención inmediata. Por ello se desmontó la cubierta para remplazar aquellas piezas en mal estado. También se restauró la escalera de acceso.

En la ventana que aparece sobre la puerta de acceso se desmontaron los sillares que la cegaban, recuperando el hueco de la ventana y su fisonomía original.

En el entorno de la iglesia se consolidó la escalera de acceso, se remataron los muros del atrio y se retiraron los arbustos, conservando aquellas especies que crecen de forma natural en la zona. El objetivo de la actuación ha sido realzar el conjunto atrio-iglesia.