Los nazarenos desafían a la lluvia, pero con prudencia

Largas hileras moradas y tres imágenes a hombros, las de Nuestro Padre Jesús Nazareno (el 'Viejo o el 'Abuelo', como le dicen cariñosamente los devotos); Jesús Nazareno con el Cirineo, talla titular de la cofradía, y Nuestra Madre la Virgen de la Amargura. Pero solo estas, las otras tres que figuran en el programa no vieron la luz en esta ocasión, prudencia ante la amenaza de lluvia, y decisión de que solo desfilaran los pasos principales. La Verónica, Longinos y La Erección de la Cruz tendrán que esperar un año a más, a ver si el buen tiempo les permite la salida.

Pero no fue este el único cambio prudencial introducido por los nazarenos en la procesión de Los Pasos de este Viernes Santo. También el recorrido se ha visto alterado, dado que los pronósticos apuntaban a posibles lluvias pasado el mediodía. Se ha celebrado un recorrido mucho más corto del programado, con un desfile hasta la Catedral, en donde se han tomado las calles Jorge Manrique, Juan de Castilla y Barrio y Mier, para alcanzar la Calle Mayor, desde donde regresar a San Pablo.

En la plaza, las tres imágenes, una vez formados los cuadros de las diferentes cofradías, han celebrado un emotivo acto de despedida, con la entrega de una corona de laurel como homenaje a los difuntos. Las marchas procesionales han sonado en honor de las tallas de Jesús y de la Virgen y los tres pasos han regresado al interior del palacio nazareno.

La procesión ha estado también marcada por las llamativas escoltas de la Guardia Civil a las imágenes de Jesús Nazareno.