Piden seis años para un hombre capturado con un kilo de cocaína durante una accidentada huida

La Audiencia Provincial juzgará el próximo miércoles, 9 de octubre, a un hombre acusado de un delito de tráfico de drogas y otro de resistencia, que fue detenido en la autopista AP-6 en término de El Espinar hace un año, el 19 de octubre de 2018, con 968 gramos de cocaína ocultos en una maleta dentro del cohe que conducía. La Fiscalía de la Audiencia pide para el acusado, A.M.M., seis años y seis meses de prisión por el presunto delito contra la salud pública y una multa de 110.000 euros, y también otra pena de un año de cárcel por un supuesto delito de resistencia a los agentes de la autoridad.

En el relato de los hechos que hace el fiscal señala que A.M.M. circulaba a las tres y media de la madrugada por la autopista AP-6 en dirección a Madrid. En el kilómetro 60, en término de El Espinar, fue interceptado por agentes de la Guardia Civil que estaban haciendo un control, que le dieron el alto y la conminaron a que bajara del vehículo. Los agentes registraron el coche y le instaron a que abriera el bolsillo de una de las maletas que llevaba, pero el hombre alegó, nervioso, que estaba roto y no se podía abrir.

Accedió al final, abrió el bolsillo de la maleta y, zafándose de los agentes, emprendió la huida con una bolsa de plástico blanca que había extraído. A la carrera, saltó la bionda de la autopista y descendió por el terraplén, de gran pendiente, mientras le perseguían los agentes instándole a que se detuviera. Hizo caso omiso de la advertencia, pero al final fue detenido y forcejeó con los guardias, que tuvieron que reducir al hombre porque no cejaba en su actitud violenta.

Uno de los agentes, que cayó por el terraplén cuando perseguía al acusado, fue el que forcejeó con él; otro de ellos se golpeó en la rodilla con la bionda al perseguir al hombre, que además le arañó cuando le atraparon; un tercer guardia resultó lesionado al intentar ponerle los grilletes, rozándose con las esposas al intentar ajustarlas mientras el acusado se revolvía, y un cuarto agente también se cayó en la persecución, durante la que el hombre no acató en ningún momento la orden de los agentes para que se detuviera, ni tampoco después, una vez interceptado con la bolsa con la que intentó huir, pues continuó el forcejeo hasta que pudieron reducirlo.

Fue después cuando los agentes encontraron, dentro de la bolsa de plástico, un paquete que contenía una sustancia blanca. Tras ser analizada, la sustancia resultó ser cocaína con una pureza media de casi el 72% y que, con un peso de algo más de 968 gramos, habría alcanzado en el mercado negro un valor de 32.736 euros.

El parte de lesiones de los agentes que detuvieron al acusado, producidas en la persecución y el forcejeo, es extenso. Uno de ellos solo tuvo escoriaciones en los dedos de una mano; el segundo también heridas en las manos y en una rodilla; el tercero, heridas abrasivas en una rodilla y una subluxación en un dedo; y el tercero, una fractura del troquíter del húmero y rotura de fibras de isquiotibiales y el bícps femoral de la pierna derecha.