La Junta integrará en una misma licitación rutas escolares y regulares

La Consejería de Fomento mantiene el horizonte de iniciar las licitaciones de las nuevas concesiones de transporte interurbano de Castilla y León antes de diciembre de 2019, con la previsión de reducir el número actual y de incardinar en el conjunto el transporte escolar y el regular, aunque con la incertidumbre de las condiciones que pueda establecer la liberalización del sector anunciada por la Unión Europea. El director general de Transpotrtes, Ignacio Santos, comentó ayer en Segovia que una vez aprobada la nueva ley regional, que está en su última fase de redacción, dispondrá de un nuevo mapa del transporte y a partir de ahí se sacarán los anteproyectos y después a licitación los nuevos contratos.

Santos participó en la gala de la Agrupación Segoviana de Empresarios de Transportes, en la que se concedieron los premios Acueducto de Plata a Autobuses Garrido y El Norte de Castilla, y mencionó entre las novedades fundamentales de esta reordenación del transporte terrestre en Castilla y León que el número de concesiones será «más eficiente», en la búsqueda de un servicio zonal que integrará en una misma licitación el transporte escolar y el regular. Es decir, una de las características será la integración de las rutas escolares y regulares, junto a la potenciación del transporte a la demanda como modo fundamental de transporte en los núcleos rurales», indicó el director general.

Este carácter general de integración de los servicios de transporte es ya un modelo que se aplica en la provincia de Segovia, donde hay 57 rutas integradas, y es el modelo que quiere aplicar Fomento en toda la comunidad. «Es una ley rural para un mapa rural, que dé respuesta a los pueblos y con el transporte metropolitano a las ciudades, porque Castilla y León es una comunidad muy rural y tenemos que dar las dos respuestas», destacó Santos.

La reducción del número de concesiones responde a la necesidad de reordenar un sector que en la comunidad cuenta con muchas concesiones que datan de 1947, de la primera ley de transportes mecánicos, «que no son adecuadas a lo que es Castilla y León hoy». Entonces había mucha gente en los pueblos y no había acceso al transporte privado, comentó Santos: «Había muchos viajeros en los pueblos y las ciudades no eran como ahora, no había un alfoz con el desarrollo alrededor de la ciudad y pequeñas urbanizaciones o con pueblos pegados a las ciudades que han crecido mucho».

Reconstituir el modelo es el objetivo de la DirecciónGeneral de Transportes, «con un número de concesiones adecuado a esos términos. No tantas como hay ahora, porque en Castilla y León tenemos muchas autorizaciones especiales que no son verdaderas concesiones, y será un número suficiente, que dé respuesta a la posibilidad de que las pequeñas y medianas empresas puedan estar ahí para seguir contando con ellas, dentro de lo que permite la ley de contratos».

En este sentido, Ignacio Santos señaló que dentro de esas limitaciones legales se trata de hacer un esfuerzo para «integrar a los concesionarios operadores que han estado trabajando duramente muchos años y son los conocedores del territorio. Nuestra petición a ellos –añadió– es que se unan, que hagan el esfuerzo suficiente para que podamos seguir contando con ellos en las nuevas licitaciones».