Aguilafuente: una villa que suena a paloteo

Los primeros días de febrero Aguilafuente suena a paloteo. La villa celebra Las Candelas y San Blas al ritmo de los palos, la dulzaina y el tamboril. Se trata de la primera fiesta del año, muy esperada por el pueblo y sobre todo por los grupos de danzantes que sacan de los baúles sus manteos y trajes regionales sabiendo que van a llevar a cabo todo un ritual a través de estas danzas ancestrales. En esta villa se realizan 14 paloteos durante las procesiones y aunque los bailes datan del siglo XIX, hubo un tiempo de parón. En 2020 se celebró el 40 aniversario de la recuperación del paloteo.

Otra de las citas con la tradición tiene lugar el primer fin de semana de agosto momento en el que se conmemora la llegada de la imprenta a España mediante la recreación histórica del 'Sinodal de Aguilafuente', primer libro impreso en España.

A través del teatro interpretado por los vecinos se cuenta la historia de lo que sucedió en la villa entre los días 1 al 10 de junio de 1472 y que marcó un punto fundamental en la historia. Pasacalles, mercados, música y otros muchos actos complementan el fin de semana.

En el caso de las Fiestas en Honor al Santo Cristo de la Peña comienzan con la bajada del Cristo desde su ermita hasta la iglesia donde permanecerá durante el transcurso de la novena. El fin de semana más cercano al 25 de octubre esta fiesta celebra sus días grandes. La asociación San Frutos prepara los actos festivos.

El domingo se celebra la misa y procesión. Tras la llegada a la puerta del templo comienza la tradicional subasta de palos y mandas. La fiesta termina con un cántico que comienza «de Aguilafuente, Cristo bendito, que en una peña tiene su altar…».