El Instituto de la Cultura Tradicional prepara la edición de nueve libros más

El Instituto de la Cultura Tradicional Segoviana Manuel González Herrero prepara nueve publicaciones más para los próximos meses que se sumarán a las cinco ya editadas desde su puesta en marcha en julio de 2012. Dos años y medio de trayectoria en los que «ha superado las expectativas», según destacó ayer el presidente de la Diputación, Francisco Vázquez, para valorar una «apuesta necesaria por el mundo de la cultura» que arrancó con un presupuesto de 120.000 euros y que en este ejercicio ronda los 300.000.

«El objetivo era y es recuperar y rescatar del olvido las señas de identidad de los pueblos, las que nos distinguen y las que nos unen como provincia, porque la razón de ser del propio instituto es la conservación de esas tradiciones», reseñó Vázquez, en declaraciones recogidas por Ical, durante el balance que realizó junto a su directora, Sara Dueñas. En total, este organismo dependiente de la Diputación ha llevado a cabo más de medio centenar de iniciativas desde su puesta en marcha y «supera con creces la actividad de institutos similares de otras provincias y comunidades», añadió.

Investigación, difusión, formación y publicaciones son las cuatro grandes áreas del González Herrero, y en los próximos meses se perfila especialmente activo a nivel editorial. No en vano, prácticamente triplicará sus fondos, dado que en dos años y medio impulsó cinco obras y pasará a sumar catorce a corto plazo. Todas las publicaciones son resultado «de las investigaciones llevadas a cabo y las propuestas de los diferentes investigadores» que colaboran con el instituto. En octubre de 2013 presentó su primera publicación, el audiolibro Agapito Marazuela, de verdad. 1891-1983; y en la colección Archivo segoviano de folclore se enmarca La tradición oral en Vegas de Matute, que incluye un CD.

La serie Una mirada al ayer arrancó el año pasado con la publicación de fotos antiguas de Aguilafuente, la mayoría cedidas por particulares, y también se lanzó la recopilación de artículos publicados por Manuel González Herrero en la revista Estudios Segovianos. Además, la colección Becas de investigación se inició con Canciones de aurora, albas y danzas al despertar en el folklore de la provincia de Segovia. Una perspectiva sociocultural, de María Ángeles Rubio Gil, que obtuvo una de las tres ayudas de 8.000 euros para costear trabajos etnográficos de la convocatoria de 2013.

Próximas obras

«En proceso de publicación» se encuentran los otros dos trabajos becados aquel año: Mapa geográfico-festivo a comienzos del S. XXI, de Esther Maganto Hurtado; y Estudio y documentación de la etnografía segoviana de la imagen: las placas de cristal de tipo costumbrista del padre Benito de Frutos, de Cuéllar, de Carlos Antonio Porro Fernández.

Junto a las tres becas de investigación de cada año se convoca también una de fotografía documental con 6.000 euros, y en breve saldrá el primer trabajo bajo el título La vuelta de los resineros, de Diego Gómez Gómez. Las cuatro obras de 2014 también se sumarán y más adelante también las de la convocatoria de 2015, cuyas bases «se han aprobado esta misma mañana», anunció el presidente de la Diputación. También saldrá a la venta de nuevo El romancero general de Segovia, del que «estaban agotadas todas las ediciones», prosiguió Vázquez; un nuevo audiolibro, Los grandes dulzaineros de Segovia; y las obras de la colección Una mirada al ayer protagonizadas por Santa María la Real de Nieva, Prádena y Coca.

Completan la nómina de próximas publicaciones Corrientes nacionales e internacionales del esgrafiado, del académico de San Quirce Rafael Ruiz; Danzas de palos en la provincia de Segovia, de Fuencisla Álvarez; Estudios antropológicos sobre Navas de Oro, de Joseph Aceves; y El Pinar. Social factors related to rural development in a spanish village, en colaboración con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas.

Dueñas, por su parte, valoró el creciente apoyo recibido por el González Herrero desde su inicio y las numerosas «personas y asociaciones que se han acercado en estos años a presentar proyectos y buscar colaboraciones». «Empezamos con un presupuesto de unos 120.000 euros, aparte de las becas de investigación, y ahora, junto con la colaboración que hacemos con otras instituciones y asociaciones, llega casi a los 300.000», apuntó.