El alcalde de Castillejo de Mesleón optará con 85 años a su décimo mandato

El alcalde que más mandatos acumula en la provincia de Segovia, y uno de los más veteranos de toda España, volverá a presentarse a las elecciones municipales. «No, nada cansado», responde enérgicamente cuando se le pregunta por el peso de los años y los mandatos que lleva a sus espaldas nueve desde la llegada de la democracia, aunque llegó a la alcaldía en 1964. Se trata de Ricardo Díez Pascual, el regidor de Castillejo de Mesleón, un pequeño municipio del nordeste con 150 habitantes censados. A sus 85 años recién cumplidos, este antiguo cobrador de Unión Fenosa volverá a optar a la alcaldía como cabeza de lista del PP y formará candidatura, al menos, con tres de los cuatro ediles que le han acompañado en el equipo de gobierno en esta legislatura, con los que consiguió en los pasados comicios el 67% de los votos. El cuarto concejal, según dice, podría variar.

Si vuelve a contar con la confianza de los castillejanos en mayo, como así lo cree, Ricardo Díez se propone para los próximos años seguir extendiendo el casco urbano de la localidad. Según cuenta, a muchos vecinos de Madrid les gusta este pueblo colindante con Riaza, Cerezo de Arribas y Boceguillas, por lo que pretende aprovechar el tirón para construir chalés. Solo en una urbanización, Castillejo de Mesleón tiene disponibles 140 parcelas, 40 de ellas propiedad del Ayuntamiento, que en caso de quedar ocupadas permitirían a la localidad multiplicar su población, especialmente en verano si estas se venden para segundas residencias.

Este longevo alcalde, el que más tiempo ha permanecido en el cargo de forma ininterrumpida en todo el país, confiesa que su actividad al frente del Consistorio le ha costado alguna noche sin dormir, aunque asegura que ha ido «siempre muy bien». De sus más de 50 años en el sillón municipal, 12 de ellos además como diputado provincial, recuerda todo con detalle y, de hecho, está pensando en dejarlo todo plasmado en una biografía. «Siempre estoy diciendo que lo tengo que escribir, pero no me pongo a ello», comenta.

En medio de una crisis que parece no terminar y en plena polémica por los casos de corrupción que han desvirtuado la imagen de los partidos, entre ellos el suyo propio, este octogenario regidor se muestra esperanzado por que todo vuelva a ser como antes, sin tantas corruptelas ni estrecheces económicas. «La corrupción, por cuatro de los nuestros, nos ha perjudicado mucho», lamenta en referencia al PP. Ahora, dice, se empieza a notar un incremento de las ayudas provinciales y la llegada de fondos. Consciente de la irrupción en política de los movimientos ciudadanos, alude además al auge de Podemos, un boom que en su opinión tendrá escaso recorrido.

Desde los 32 años

Ricardo Díez Pascual accedió a la alcaldía por primera vez con 32 años, el 4 de noviembre de 1964. Al llegar la democracia se presentó por la UCD y en años posteriores lo hizo con el CDS, así como con el Partido Popular, y en todas las elecciones salió vencedor, aunque no siempre tuvo rival.

Con motivo de sus bodas de oro al frente de la alcaldía, el presidente de la Diputación, Francisco Vázquez, le impuso el pasado mes de septiembre la insignia de oro y brillantes de la institución. Padre de tres hijos, con cuatro nietos y con medio siglo de experiencia como regidor, este eterno edil no tiene visos de abandonar su bastón municipal. «Seguiré hasta que el cuerpo aguante», promete.