David Espinar: «Dejar entrar al público solo en algunos estadios sería pervertir la competición»

«Si estamos ya en fase 3 en la isla, por qué no va a poder entrar público al estadio», vino a decir Miguel Ángel Ramírez, en una ocurrencia a la que poco a poco se han ido sumando desde otros puntos de España, alentados por el silencio administrativo proclamado desde la patronal.

Aguardaba Tebas su momento para ahondar en esta idea y ganar más aliados para una causa que permitiría a los clubes ahorrarse un buen pellizco en la devolución de la parte proporcional de los partidos jugados a puerta cerrada. Conocedor del eco que tienen sus palabras más allá del fanatismo de un puñado de aficionados, el mandamás del fútbol español eligió la noche del pasado domingo en horario de máxima audiencia fubolística para lanzar su proclama. «En el momento que se pueda tiene que haber aficionados en aquellos sitios dónde se pueda», recalcó en el programa El Partidazo de Movistar +, negando que se vayan a producir desigualdades. «Hay ataques de integridad deportiva y también se podría decir que los equipos que juegan competición europea contra uno que no lo hace podrían estar más cansados», subrayó Tebas poco antes de dejar un ejemplo sobre la mesa. «Nadie se acuerda que el Eibar-Real Sociedad fue a puerta cerrada y el Eibar perdió 0-2 jugando sin público. ¿Decimos que el Eibar cayó por jugar sin gente?», ironizó.

Calcula Tebas que en la guía que va a presentar Sanidad este martes para la denominada 'nueva realidad' en la fase posterior a fase 3 se permita la entrada a los estadios con un aforo reducido. De ahí la mesura de los tiempos que maneja, algo que no es compartido por todos los clubes de Primera.

En Valladolid no todas sus decisiones son aplaudidas y algunas, caso de esta, son consideradas temerarias e incluso injustas. «Creo que dejar entrar al público solo en algunos estadios sería pervertir la competición», asegura a este diario David Espinar. Considera el jefe de gabinete de presidencia del club blanquivioleta que una decisión de ese calado perjudicaría a algunos clubes por muchas razones. «Algunos clubes, por ejemplo, no van a jugar en sus estadios porque se les dijo que se iba a jugar lo que faltaba a puerta cerrada, y van a salir perjudicados», señala, apuntando que «tantos bandazos» lo que genera es más polémica. «La decisión de abrir los estadios tienen que ser la misma para todos, no para unos sí y para otros cuando se pueda. Tampoco se entiende, por ejemplo, que se deje entrar solo a veinte periodistas en una zona en la que caben 8.000 personas», asegura Espinar, que también alude a los cinco cambios en su queja por cambiar las reglas en marcha.

En el caso del Real Valladolid, y en vista de los últimos sobresaltos, ahora mismo se trabaja en cualquier contigencia que altere el guion marcado en un principio y ya se barajan varias fórmulas para afrontar una posible vuelta de público a las gradas de Zorrilla. También en este punto alteraría los planes de unos cuantos clubes que ya han procedido a la devolución a sus abonados de la parte proporcional de los partidos no disfrutados.

En las oficinas de Zorrilla, mientras, se está terminando de preparar la plataforma a través de la cual los más de 22.000 abonados van a poder anunciar a cuál de las tres alternativas se acogen. Cabe recordar que los socios pueden recibir la cantidad correspondiente esta misma temporada (un 31% del carnet), o bien acumular ese importe como descuento en la renovación del abono para la siguiente campaña, o bien renunciar a ello en favor del club. «El retraso no se debe a otra cosa que se está terminando de preparar esa plataforma. De ese dinero dependen muchas familias y no queremos fallar», explica desde Madrid Espinar, quien confía en ponerlo en marcha en las próximas fechas. La mano derecha de Ronaldo viaja este miércoles a Valladolid para instalarse ya hasta final de liga.