Ribas de Campos: un legado histórico encauzado por el Canal
Los hechos que marcan la historia de Ribas de Campos no puede entenderse sin la llegada del Canal de Castilla a Calahorra y la construcción del monasterio de Santa Cruz de la Zarza
rebeca adalia
Jueves, 21 de julio 2022
El de Ribas de Campos es un municipio que puede presumir por albergar en su núcleo rural, en Calahorra de Ribas, uno de los trazados más significativos del Canal de Castilla: la triple esclusa del ramal Norte.
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La construcción de las esclusas 22, 23 y 24, englobadas en el proyecto hidráulico de ingeniera más ambicioso y faraónico de nuestra historia suponen un antes y un después para esta localidad palentina. Además, aquí fue donde se iniciaron las obras en 1753, y por eso tiene el honor de ser el lugar con más significado histórico del trazado del siglo XVIII.
También, este punto es significativo porque aquí se unen las aguas del río Pisuerga con las del río Carrión, circunstancia que abrió un abanico de posibilidades para los habitantes del municipio con la llegada del molino, el batán y la central eléctrica.
En la actualidad, la triple esclusa del canal es un reclamo de interés para los turistas y destaca por pertenecer al ramal que salva más desnivel.
Monasterio protogótico
El monasterio de Santa Cruz de la Zarza de Ribas de Campos tiene sus primeros antecedentes históricos en el año 922.
En aquel entonces el conde Fernán Ansúrez funda en esta zona un lugar para el retiro espiritual, cuyas posesiones pasan más tarde a los comendadores de Santiago.
Fechas clave
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Año 922: El conde Fernán Ansúrez funda el Monasterio de Santa Cruz de Ribas.
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1931: El Monasterio de Santa Cruz de la Zarza es declarado monumento histórico-artístico.
La edificación actual data del año 1176 en el que alcanza su máximo esplendor. En los siglos XVII y XVIII se intensifican las obras de remodelación, alcanzando en dichas fechas el aspecto actual. Lamentablemente, a mediados del siglo XIX tras la desamortización de Mendizábal, el monasterio queda abandonado.
Aun así, se declara monumento histórico-artístico en 1931. Y en el año 2017 se consigue sacar al templo de su estado de ruina tras largos litigios judiciales.