San Marcos trajo la lluvia a Palencia

Aunque el cielo había ido encapotándose a lo largo de la jornada, a primeras horas de la tarde la temperatura era más que agradable, por lo que los accesos al parque del Sotillo pronto se fueron llenando de palentinos deseosos de pasar una tarde de feria. Pero pronto, la que se prometía como una agradable jornada de romería se tornó en desilusión y la mayor parte de los asistentes tomaron el camino de regreso ante la súbita aparición de la lluvia.

Las primeras gotas asustaron a unos pocos y todavía muchos se atrevieron a intentar seguir disfrutando de la romería de San Marcos, pero el conocido como patrón de los charcos decidió hacer honor a su nombre, e hizo que arrancase la lluvia con intensidad, por lo que poco a poco fue vaciándose el parque del Sotillo y solo unos pocos valientes quedaron alrededor de las atracciones de feria, los puestos de venta o las casetas en donde los cocineros participantes en el concurso de guiso de caracoles elaboraban sus platos.

«Da un poco de pena, pero con la falta que nos hace la lluvia no vamos a quejarnos ni un poquito», explicaba el concejal de Festejos Sergio Lozano, quien señalaba que a pesar de la lluvia seguían siendo muchos los palentinos que intentaban disfrutar de la tarde en el parque del Sotillo. «Es una cita muy tradicional, en un parque emblemático y los palentinos tienen la costumbre de acudir a esta romería y además son conscientes de que llueve en muchas ocasiones. El año pasado tuvimos una tarde extraordinaria, pero el anterior también estuvo pasada por agua, y hoy, con la falta que hace, no nos vamos a quejar», recalcó Lozano.

Mayor decepción presentaban los rostros de los 76 vendedores ambulantes y de los propietarios de las nueve atracciones de feria que se habían instalado en el Sotillo y abonado las tasas de ocupación de vía pública, puesto que veían con impotencia cómo las posibles ganancias se iban esfumando con cada una de las gotas de lluvia que descargaban sobre sus toldos.

Pero con lluvia o sin ella, los caracoles no dejaron en ningún momento de convertirse en los protagonistas de la jornada y las raciones de este guiso no pararon de venderse en toda la tarde.