«Tengo que poder». Tres palabras que lo expresaron todo en la comparecencia de la consejera de Sanidad en las Cortes de Castilla y León. ... En estos momentos donde la clase política infla números de test, baja números de fallecidos, juega al pinto pinto con las decisiones de desescalada y crea más dudas que aclaraciones, escuchar a una consejera romper a llorar al dar nombres, no cifras, de los sanitarios que han perdido la vida ayudando, me hace ver que no todo está perdido. La humildad y la humanidad que mostró Verónica Casado ante una cámara expectante, hace que no solo tenga todo mi respeto, sino también, mi aplauso y mi admiración.
Publicidad
Creo que es una frase que todos nosotros podemos repetirnos cada vez que nos tambaleemos en esta cuerda floja que creo será la «nueva normalidad» que nos dice Pedro Sánchez. Porque no sé a ustedes pero a mí, me asusta. No solo por el virus, que estará ahí cuando vuelva a abrir la puerta de mi casa, sino porque no me imagino un mundo sin abrazos, me duele pensar en la situación económica que vamos a atravesar de nuevo y lo que eso va a suponer para millones de hogares, por no hablar de todo el dolor que se ha ido acumulando en las familias que han perdido a sus seres queridos por esta pandemia. Todo será diferente a como lo conocemos. Así que en ese momento cuando rompa a llorar, pensaré en esa frase: «tengo que poder» y entre todos algún día lograremos vivir, bien espero, en esa «nueva normalidad» que no sé si quiero que llegue pronto.
Noticia Relacionada
Comienza la jornada bien informado con nuestra newsletter 'Buenos días'
3€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión