Puigdemont interviene ante Sánchez el pasado día 13 en el Parlamento de Estrasburgo. RONALD WITTEK-EFE

Puigdemont cena en casa

LA ESPITA ·

La pregunta en la política de Castilla y León hoy no es si el PSOE aguantará mucho así con Luis Tudanca como secretario general. La pregunta ya es : ¿Cuánto aguantará?

J. I. Foces

Valladolid

Domingo, 24 de diciembre 2023, 00:38

El invierno ha llegado con los mismos aires electorales con los que se despidió el anterior. La convocatoria en Galicia anticipa un año de llamadas ... a las urnas, aunque detrás de la que ha hecho el gallego Alfonso Rueda solo tienen fecha las europeas de junio próximo. Con circunscripción única en toda España. Pero a la cola están los vascos, los catalanes y, según ansían los más ludópatas electorales, que en una de estas vaya Alfonso Fernández Mañueco y se le ocurra adelantar de nuevo en Castilla y León para intentar quitarse de encima el lastre de Vox. Aunque si nos atenemos al antecedente de lo que hizo hace dos años, para sacudirse a Ciudadanos y mandar a Francisco Igea al infierno del grupo mixto de las Cortes, le iban a tener que insistir hasta la extenuación para que diera ese paso otra vez. «No se imagina usted lo que nos ha costado convencerle», le dijo a este cronista una de las cabezas mejor amuebladas de cuantas militan en el PP de esta tierras. Claro que, como en cualquier otro aspecto en la vida, todo es empezar. Y como a Mañueco le salió bien aquella vez, ¿por qué no repetir? De momento, esto es política ficción propia de esos ludópatas electorales que les digo. No obstante, el 'vicenada' de la Junta y presidente de la parte de Vox en la Junta, Juan García-Gallardo, haría muy bien en guardarse las espaldas y recordar que cuando menos lo espere le va a saltar esa liebre porque, sea en 2024 o en 2025, adelanto en Castilla y León va a haber. Apunte Gallardo la convocatoria catalana, si es después del verano. Y apunte la tranquilidad que le va a dar al PP y a Mañueco que se aprueben los próximos presupuestos de Castilla y León, aunque 2024 empiece con los de 2023 prorrogados.

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Claro que no es de extrañar que haya excitación electoral en algunos ámbitos después de escuchar el monólogo que se marcó Luis Tudanca, secretario regional, que no líder, del PSOE con motivo de la copa navideña a la que invitó el pasado jueves a la prensa. Este cronista tuvo que mirar dos veces el calendario para saber que no era el Día de los Inocentes. «Hoy soy el secretario general y el candidato», exclamó ufano. No hace falta ser un lince para leer entre líneas. El no líder socialista venía a decir que si Mañueco adelanta elecciones, ahí está él para el cartel socialista. No consta que en el PP Mañueco, Francisco Vázquez y 'Guapo de discoteca' (según por Ávila) Raúl de la Hoz descorchasen botellas de espumoso para celebrar el anuncio de Tudanca, pero no será por falta de motivos. Con Vox a la baja y Tudanca de cartel del PSOE, muy mal se le tiene que dar a Mañueco para no rozar la mayoría absoluta que tanto ansía y, así, equipararse a Lucas y Herrera.

Una vez que no le han querido en ningún ministerio, así fuera de asesor de un subsecretario, Tudanca se agarra a su escaño de las Cortes de a casi 100.000 euros al año. Y ya saben, si le quitan... Hace una semana, Ximo Puig, el hasta mayo todopoderoso president de la Generalitat de Valencia, dio un paso al lado y abrió el melón de su sucesión. Se queda de senador y el PSPV-PSOE, a preparar otro secretario y candidato. ¿Un ejemplo para Tudanca? ¡Ja! De los llantos de la noche del 13 de febrero de 2022 y aquel 'Otros vendrán que harán más', ha pasado, malquerido por Ferraz, al 'Hoy soy el secretario general y el candidato' del jueves pasado.

Tudanca con la minsitra Ana Redondo, el pasado jueves en Valladolid. E.P.

La pregunta en este PSOE de Castilla y León ya no es si aguantará con Tudanca al frente de la ejecutiva; la gran cuestión es cuánto podrá aguantar. A la vuelta del verano a este cronista le advirtieron de que desde Madrid se había empezado a trabajar la idea de buscar un secretario regional interino de consenso y que esté en las Cortes (¿De Segovia y procurador? ¿José Luis Vázquez?) para evitar la implosión del PSOE regional mientras preparan una candidata (en femenino, sí), para competir a la Junta ante Mañueco. Esos que plantean esta operación piensan en la leonesa secretaria federal de Igualdad del PSOE y diputada nacional, Andrea Fernández. ¿En qué momento está esto? Pues nadie sabe hoy a ciencia cierta, porque en el PSOE bastante tienen militantes y cargos con digerir la amnistía y los pactos con Bildu. ¡Como para pensar en qué hacen en Castilla y León! Claro que su secretario regional que no líder, no ha debido pararse a pensar en que hoy es Nochebuena y Carles Puigdemont viene a cenar a casa. ¿A qué casa?, se preguntará el lector. A la suya, a la mía, a la de todos, porque no habrá cena familiar en la que no salga a relucir esta noche el prófugo de Waterloo. Y Tudanca pensando en ser candidato... Claro que a lo mejor no le queda otra porque no encuentra el PSOE quién se suba a ese potro de tortura.

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