El ultimo de la fila.... en Valladolid Toma la Palabra: «Se ha trabajado con y para la gente»

Es maestro rural y defensor de la escuela pública «laica, gratuita y de calidad», subraya. Desde Peñafiel a Renedo pasando por Langayo y Santovenia, colegios en los que ha ejercido su profesión, Pablo Redondo, de 50 años, mantiene ahora ese compromiso con la enseñanza en el sindicato Comisiones Obreras. Implicado con el tejido asociativo desde siempre –Amnistía Internacional, Sodepaz, Coordinadora de ONG, Asociación Los Comuneros de La Victoria...– en estas elecciones da el salto a la política para cerrar, con el número 27, la lista de Valladolid Toma la Palabra, un proyecto que le ilusionó desde el primer momento y que respalda desde la retaguardia de la candidatura.

«La motivación para presentarme es apoyar el trabajo bien hecho que han desarrollado los tres concejales de Toma la Palabra en el equipo de Gobierno: Manuel Saravia, Alberto Bustos y María Sánchez, con el apoyo de Rosalba», explica. Nada de primeras líneas. A este profesor le va el trabajo intenso, pero «desde atrás». «Mi idea nunca ha sido competir con ninguno de ellos, aunque la lista se elaboró en un proceso de primarias abierto y podía haber estado más arriba, pero en mi presentación ya manifesté que mi intención no era salir, sino apoyar a este equipo y completar esa lista, no tenía ningún problema en ir el último, en cerrarla», argumenta. El tiempo libre que tiene lo dedica estos días a apoyar en la campaña de la formación a lo largo y ancho de la ciudad. «Estoy participando en la medida de lo posible y el compromiso es con el equipo, tenga los resultados que tenga», subraya.

Para Redondo, los ediles de esta marca municipal «han puesto una cara amable en el Ayuntamiento y han trabajado con y para la gente». «Creo que hay una persona que lo define claramente, que es Alberto Bustos en la Concejalía de Participación y con su apoyo al deporte base; pero también la remunicipalización del agua, que ha llevado a cabo María Sánchez y cómo ha trabajado Manolo en urbanismo y como teniente de alcalde; han hecho una labor muy importante».

En su opinión, Toma la Palabra «no solo han complementado el trabajo del PSOE, sino que lo ha condicionado», porque, según recalca, algunas políticas no se hubieran puesto en marcha sin el impulso de sus compañeros de lista».

Y el cambio se nota. «Es evidente», afirma. «Después de veinte años de gobierno monocolor de la derecha se ha notado en las calles y en la forma de hacer ciudad», apunta. «Ahora Valladolid sale en los medios nacionales por las medidas valientes que se han tomado para defender la calidad del aire, por ejemplo. Ahora somos un referente por algunas formas de hacer política, en vez de por las estridencias del anterior alcalde», se felicita Pablo, un número 27 con las convicciones de un cabeza de cartel.

¿Qué pasará el 26 de mayo? «Ya no vamos a ir a gobiernos de un solo color con mayorías absolutas, sino que por la presencia de diferentes grupos políticos se irá a pactos», reconoce. Y él confía en que se reedite una alianza de la izquierda. «Creo Toma la Palabra y el PSOE han demostrado que esos pactos son posibles y que se puede funcionar teniendo políticas en muchos casos diferentes, pero hay que buscar el mínimo común y pienso que se puede revalidar esa confluencia», avanza. Pero, ojo, advierte Redondo: «Hace falta que la ciudadanía se mueva y participe y se crea las políticas que se pueden hacer, las políticas reales y amables, no las de ciencia ficción que se puedan lanzar en estos días de campaña».