Boxeo en Valladolid

Isa Rivero logra el título Iberoamericano y despeja el camino hacia el Mundial

La púgil vallisoletana despejó ante la sudamericana el camino hacia el cinturón mundial después de haber demostrado su adaptación a una categoría en la que se mueve como pez en el agua. Y, sí, se mueve, porque es complicado encontrar una boxeadora más ágil en el ring. En el combate por el Iberoamericano en la Cúpula del Milenio, 'la Finita' dio una exhibición de juego de piernas, de movilidad y de capacidad para entrar y salir a los guantes que dejó sin argumentos a Bolívar.

Cuando la venezolana quiso ir a por el combate ya habían pasado seis de los diez asaltos, y la pelea estaba muy decantada para la peleadora local, que, además, se dio un baño de masas, aunque la Cúpula no presentó la gran entrada de ocasiones predecesoras en una noche poco agradable en Valladolid.

Rivero recibió los ánimos a lo Rafa Nadal. «¡Vamos Isa! ¡Vamos», en un escenario que antes acogió los combates amateur entre boxeadores de Castilla y León y Galicia, en la velada organizada por el Face Off Boxing Club. En un combate muy respetuoso, los duros puños de la venezolana se escuchaban en el silencio, eso sí, al estrellarse –casi siempre– en la defensa de la pedrajeña.

Al revés, Rivero sí encontraba la cara de Bolívar ante una defensa muy baja y, quizá, demasiado abierta. Así, la púgil local puso tierra de por medio en los cinco primeros asaltos, con su directo de derecha predominante y con la izquierda para medir las distancias con su oponente.

Nunca le dio opciones con un 'baile' por todo el ring, de lado a lado, mientras la boxeadora venezolana no tenía la suficiente velocidad –ni de piernas, ni de manos– para 'cazar' a la vallisoletana.

Fue a partir del sexto 'round' cuando Bolívar se fue al frente, en el octavo logró endosar dos manos, una con la campana ya sonada, que certificaron la dureza de puños de la campeona sudamericana. Pero ahí se acabó. Paciencia desde la esquina de Isa para los dos asaltos finales, y el camino hacia el título mundial despejado para 2025.