Las lesiones aprietan al Nava

La temporada empieza a pasar factura al Viveros Herol Nava cuando todavía le quedan por afrontar nueve jornadas de Liga. Ha llegado un momento en que la escasez de efectivos amenaza con poner en peligro la solidez exhibida hasta ahora por el conjunto navero.

Hay varios factores que explican la difícil encrucijada en la que se encuentra. Por un lado, la marcha de Yeray Lamariano y de Jesús de la Hera le restó dos efectivos que sobre todo en el caso del primero eran capitales en el engranaje del equipo. Por otro, está acusando la exigencia de la competición en forma de lesiones. Viaja por ello con dudas a Valencia, donde este domingo le espera el colista de la categoría, el Maristas Algemesí. No las tiene todas consigo el equipo que entrena Álvaro Senovilla a la hora de afrontar este partido. De momento, Simón e Ismael Villagrán son dudas. El primero, que el pasado sábado no pudo terminar el duelo ante el Teucro por problemas en el tobillo, no ha entrenado en toda la semana y está en el aire su participación contra el Maristas Algemesí. A Ismael, por su parte, se le inflamó la rodilla y también ha estado KO desde el lunes.

Estas dos posibles bajas dejan en una situación delicada al Viveros Herol Nava ante el partido de este domingo, ya que es baja en este caso su ausencia es segura Darío Ajo Martín, que en las horas previas al compromiso ante el Teucro sufrió un accidente doméstico que le dañó la mano. Va a tener que estar en el dique seco unas semanas.

Álvaro Senovilla se queda con los efectivos justos, obligado a exprimir a los jugadores que están sanos. Si se confirman las bajas de Simón e Ismael Villagrán, los únicos recambios que tendrá en el banquillo serán Crístofer (portero), Carlos Domínguez (defensa), Darío Ajo (pivote), Pablo Rodríguez y Adrián Aceves (canteranos que apenas tienen bagaje de minutos en División de Honor Plata) y algún jugador más de las categorías inferiores que pueda rescatar para este partido.

Por eso no extraña que Senovilla haya tildado la semana que termina como «muy complicada». No afronta en la mejor disposición su compromiso más inmediato y tampoco el hecho de que el rival que esté enfrente sea el colista supone un motivo de alivio en las filas naveras, donde son conscientes de que el choque frente al Maristas Algemesí no será un camino de rosas. «Va a ser un partido muy duro», avisa Senovilla. «Estamos por encima de ellos a nivel de juego, pero tienen jugadores importantes». Uno de ellos es el exnavero Luisma Lorasque, pero hay más amenazas. Por ejemplo, el argentino Juan Agustín Vidal, que ha sido internacional con su selección. O su guardameta, Arguillas, que ha pasado por equipos de Liga Asobal como el Puente Genil o el Balonmano Aragón.

Para el Viveros Herol Nava, el encuentro es además esencial para seguir enganchado a la pelea por los puestos de play off de ascenso. Las dos últimas derrotas consecutivas ante el Palma del Río y el Teucro han rebajado la euforia, pero continúa a solo dos puntos de esa zona de play off que ahora cierra el Bidasoa Irún. Este, que es el principal rival de los naveros en este momento, ya que el UCAM Alcobendas se encuentra a cinco puntos, visita esta jornada también este domingo (12:00 horas) la cancha del Academia Octavio.

No desdeñan los de Álvaro Senovilla sus posibilidades de acabar jugando esa fase de ascenso a Asobal, pero también quieren que se dé valor a la temporada que están realizando, excepcional se mire por donde se mire. Con la permanencia ya en el bolsillo, que era el objetivo cuando comenzó el curso, el equipo navero encara una recta final de temporada que considera un regalo añadido. Pero no renuncia a alcanzar objetivos mayores y por ello, este domingo rendirá visita a la cancha del Maristas Algemesí con el objetivo irrenunciable de lograr un nuevo triunfo, pese a que el infortunio se empeñe en ponérselo difícil.