El Atlético Valladolid no arranca

Salvo milagro, y últimamente en Valladolid deportivamente no hay milagros, la ciudad se quedará sin balonmano de elite. Ni en Asobal ni en División de Honor. El recién creado Atlético Valladolid había levantado una gran expectación entre los aficionados, pero todo hace indicar que tendrán que esperar a mejor ocasión.

La decisión de crear el nuevo club es loable y de agradecer, pero ha llegado demasiado tarde. El BMValladolid ha estado muy solo desde que llegó Óscar Simón a la presidencia, quizás también por el particular carácter del presidente. Pero el caso es que nadie se preocupó de moverse hasta no ver las orejas al lobo. Y se ha llegado tarde.

En principio la opción era la de comprar una plaza en la División de Honor B. El candidato a venderla desde un inicio era el conjunto catalán del Sant Martí Adrianenc. Desde este club indicaron hace ya más de una semana que ellos eran un club de jugadores en formación y no para disputar la División de Honor B. Pero su pretensión era intercambiar, evidentemente con una compensación, su nueva plaza de División de Honor B por una en Primera Territorial, donde militan en la actualidad.

Desde Valladolid, y como representantes del recién creado Atlético se han puesto en contacto con el presidente del club catalán al menos cuatro personas, según reconoció el dirigente del Adrianenc. Ycada uno con argumentos diferentes. La única condición que ponían los catalanes era la de intercambiar las plazas, para que ellos pudieran seguir en la Primera Territorial, algo que el Atlético Valladolid, ni tenía ni podía ofrecer.

Así pues, los del Adrianenc, que tenían varios pretendientes, decidieron negociar con el Algemesí, que jugará en División de Honor B.

Ayer, el propio José Carlos Muñoz, impulsor del nuevo club, reconoció que «la situación es muy difícil porque no hay equipos que quieran vender la plaza en División de Honor B y ahora mismo no tendría sentido crear el club en Primera Territorial porque ya hay tres equipos en esa categoría». José Carlos Muñoz reconoció que habían hablado con la Federación Española y que les dieron buenas palabras, pero se había reaccionado tarde «y salvo un milagro no habrá equipo el año que viene».