El UEMC, pendiente del calendario para disputar siete partidos en 20 días
La Federación Española de Baloncesto reúne este miércoles a los 18 clubes de LEB Oro para consensuar medidas y decisiones a tomar por la ola de contagios
El UEMC Real Valladolid Baloncesto mira con recelo su calendario más próximo, el que debe afrontar en este mismo mes de enero, y en el ... que tiene que encajar por un lado los cuatro partidos aplazados por covid y respetar por otro las tres jornadas programadas de antemano.
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No es tarea sencilla, imposible si nos atenemos a la normativa establecida por la Federación Española de Baloncesto (FEB) por la cual se deben jugar los aplazados antes de terminar la primera vuelta (día 23 de este mes), de ahí que el club haya decidido esperar a la reunión que se celebra hoy con los 18 equipos de LEB Oro para solicitar una mayor flexibilidad. Los dirigentes confían en que ese plazo se amplíe al menos una semana más, la última de enero que desemboca en el primer partido de la segunda vuelta (en Granada), para tener más margen y ubicar el día 25 el último de los aplazados ante el CBAlmansa.
En este caso, el equipo de Roberto González afrontaría un calendario con 7 partidos en 20 días. Escaso margen, pero mucho más lógico y coherente que si tuviera que jugar 6 partidos en 13 días.
Por normativa, los aplazados deben jugarse antes de terminar la primera vuelta (día 23), lo que a día de hoy es materialmente imposible
Pendientes de esa reunión que se celebra en la mañana de este miércoles, lo que sí se conocen ya son los horarios de los dos próximos partidos. El primero tendrá lugar el martes 11 en Azpeitia con el Juaristi como rival –aplazado en su día por el brote surgido en el UEMC–. Se le planteó al club guipuzcoano la posibilidad de haber jugado esta semana pero rechazó la propuesta al tener jugadores fuera de España.
Habrán pasado nada menos que 33 días desde la última vez que compitió el equipo de Roberto González (10 de diciembre con Alicante), que apenas 72 horas después volverá a desplazarse hasta Cáceres (día 14) para afrontar la penúltima jornada de la primera vuelta.
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Una vez jugados estos dos partidos, siempre y cuando no surjan más contagios, el UEMC se plantaría en la semana del 17 de enero con dos partidos más en mente. Por un lado debe acordar con el CB Prat una fecha entre el 18 o el 19 para jugar el aplazado, y por otro debe recibir a Palma el domingo 23 (Pisuerga, 12:30 horas). Desde esa fecha hasta terminar el mes tendría que hacer hueco a otros tres partidos, siempre que el que abre la segunda vuelta (Granada, el día 29) no se acuerde posponer al mes de febrero. Sí tendrá que jugar los partidos pendientes con el TAU Castelló y el CB Almansa –se debe respetar el orden de aplazamientos– para poner fin a la primera vuelta del campeonato.
El calendario tampoco es nada favorable en el mes de febrero, ya que celebra dos jornadas en la primera semana (ante Coruña y Guipúzcoa en caso del Real Valladolid Baloncesto) y después hay dos semanas hipotecadas por la disputa de la Copa Princesa (en la reunión de hoy debe fijar fecha) y por una nueva Ventana FIBA (21 a 27).
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