CBC Valladolid: El ascenso es ya cosa de números
Carramimbre y Delteco esperan que la Federación comunique este lunes la imposibilidad de jugar y empiezan a hacer cuentas para reunir los requisitos que exige la Liga ACB
La imposibilidad de jugar una fase de ascenso, ni siquiera el partido propuesto por la Federación Española (FEB) para dilucidar el campeón de la LEB Oro y por lo tanto la primera de las plazas de ascenso, cierra mañana el penúltimo capítulo en la carrera por ascender a la Liga ACB. Atados de pies y manos por el escenario que ha dejado la crisis del coronavirus, ni el CBC Carramimbre ni el Delteco Guipuzcoa han podido reunir a sus plantillas –cinco jugadores descansan tanto en Valladolid como en San Sebastián– para reanudar los entrenamientos y esperan que la FEB comunique en la tarde de este lunes después de la reunión de su Comisión Delegada que ni habrá partido entre ellos ni tampoco una concentración para la que solo Coruña y Alicante han mostrado predisposición.
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Superado este penúltimo puente, el siguiente será el más difícil de atravesar por cuanto ya no dependerá de que entre o no la pelota. El ascenso ya es solo cosa de números. ¡Y qué números!
A pesar de que la Asociación de Clubes (ACB) aliviara hace tres años los requisitos –ya no es necesario depositar el canon de entrada y el Fondo de Regulación de Ascensos y Descensos cuyas cantidades ascendían a 4,7 millones de euros–, las exigencias económicas siguen siendo desorbitadas para un club de LEB Oro.
Opinión
El extinto canon ahora se denomina 'Valor de participación', asciende a 1.616.084 euros más IVA y se puede abonar en cuatro temporadas –con una aportación inicial de 404.021 euros– con derecho a la devolución en caso de descenso.
Este sería la primera de las tres cuentas que en caso de que se suspenda la temporada debe plantearse el CBC Valladolid, dispuesto a agotar los plazos y a estudiar todas las fórmulas posibles antes de descartar el ascenso.
El segundo de los pasos, la conversión en Sociedad Anónima Deportiva (SAD), también asusta pero deja una puerta de atrás como hilo de esperanza ya que el anteproyecto de la Ley del Deporte, pendiente de ejecución, elimina la obligatoriedad de los clubes de convertirse en SAD cuando ascienden a ligas profesionales. Siendo como es un borrador, este 'trámite' ascendería a 1,8 millones con un primer pago de 100.000 euros. Si se consigue salvar estos dos requisitos, el club que preside Mike Hansen ya solo tendría que enfrentarse al único al que acostumbra desde su fundación; reunir un presupuesto mínimo de 2 millones. Una cifra que se redujo ligeramente hace tres temporadas a petición de la FEB ya que hasta entonces ascendía a 2.300.000 euros.
Las cifras del ascenso a Liga ACB
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1
1,6 millones de euros necesarios para pagar el cánon que exige la Liga ACB, denominado 'valor de participación', a pagar en 4 años. En el primero solo debe abonar 404.021 euros. Cantidad que sería recuperable en caso de descenso.
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2
1,8 millones de euros necesarios para la conversión en SAD, con un primer pago de 100.000 euros en el primer año. El Gobierno pretende eliminar, y así lo ha incluido en la nueva Ley del Deporte, la obligación de convertirse en Sociedad Anónima para competir en ligas profesionales
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3
2 millones de euros de presupuesto mínimo, cantidad que antes de modificarse en 2017 ascendía a 2,3 millones.
Todo ello en cuanto a las cifras más gruesas de la operación, ya que por el camino aparecen cantidades menores como los 4.511 euros a abonar en concepto de inscripción del equipo en la competición o los aproximados 9.800 que supone afrontar la auditoría llevada a cabo por auditores designados por la ACB, que dicho sea de paso se beneficia de los derechos audiovisuales y de publicidad estática derivados de la competición.
En un escenario de crisis global, el CBC Valladolid inicia a partir de este lunes esta cruzada imposible con un solo requisito cumplido: disponer de un pabellón con un aforo mínimo de 5.000 espectadores.
Requisitos que hay que cumplir antes del 15 de julio para ser admitido
La Asociación de Clubes de Baloncesto pide acreditar una solvencia económica-financiera a través de los siguientes documentos:
- Copia de la escritura de constitución de la entidad y de sus estatutos vigentes.
– Documentos acreditativos de no tener deudas pendientes, líquidas y exigibles, con otros socios de la ACB, con ésta, con la Federación Española de Baloncesto y con entrenadores o jugadores.
– Certificaciones acreditativas de la inexistencia de deudas tributarias y de Seguridad Social.
– Estados financieros intermedios cerrados a 31 de mayo de la temporada en que se solicita la afiliación (balance, cuenta de pérdidas y ganancias, estado de cambios en el patrimonio, etc).
–Informe del auditor designado por la Asociación de Clubes de Baloncesto. Si del informe del auditor se deprende alguna de las situaciones descritas en los apartados anteriores, se concederá al club afectado un plazo de 15 días para subsanarlas.
– Presupuesto económico para la siguiente temporada.
– Memoria explicativa de la estructura técnico-deportiva y de gestión de la entidad.
– Resguardo acreditativo del abono del importe del derecho económico para participar en las competiciones oficiales de ámbito estatal y de carácter profesional de baloncesto. En garantía del pago de dichas obligaciones podrá admitirse transitoriamente aval bancario.
– Memoria descriptiva de las instalaciones deportivas que deberán cumplir las prescripciones previstas, entre otras un aforo mínimo de cinco mil espectadores sentados. –Relación de los miembros de la Junta Directiva o Consejo de Administración, así como de los apoderados. Y relación de los accionistas de la Sociedad Anónima Deportiva.
– Carta de manifestaciones indicativa de si se han producido hechos o condiciones de relevancia económica significativa desde la fecha de cierre de los Estados Financieros auditados.
– Cualquier otra documentación que a juicio del Director General ayude a determinar con mayor precisión la situación económico-financiera del club o SAD, pudiendo solicitarse garantías adicionales tales como fianzas, avales o prendas, en el caso de que dicha situación lo hiciera aconsejable.