El Museo Etnográfico descubre la riqueza textil del África occidental

La tela Kente y los paños Adinkra de Ghana, el Bogolán de Malí o la pintura sobre tela Korhogo de Costa de Marfil son algunos de los tejidos que pueden verse en el Museo Etnográfico de Castilla y León en la exposición 'El lenguaje de las telas. Arte textil en África Occidental'.

Son tejidos existentes en los países de esta parte del continente africano y aunque son muy diferentes entre sí, todos tienen en común el uso del algodón y la forma artesanal de realizarlos.

Para ello se utilizan telares muy rústicos y se van elaborando bandas estrechas de tejido que se unen entre sí para formar paños.

La muestra, que cuenta con piezas textiles y fotografías, es un proyecto en el que colaboran el Museo Nacional de Antropología, la Asociación Cultural Mamah África y el Museo Etnográfico, en cuya sala de exposiciones temporales permanecerá la colección hasta el 6 de septiembre.

El recorrido por la exposición permite comprender la variedad de tejidos existente en los países del África occidental, desde la tela Kente y los paños Adinkra, elaborados por la etnia Ashanti de Ghana; al intenso color del Batik o el Bogolán, hecho con arcilla en Malí.

También hay pintura sobre tela Korhogo, de los senufos de Costa de Marfil. Todo ello representa «un conjunto de saberes y técnicas ancestrales transmitidos oralmente».

Durante el recorrido por la sala puede conocerse el proceso de elaboración de cada una de las telas, los diferentes tipos de tejidos y su adaptación a través de la moda. Cuenta con fotografías de Kim Manresa, diseños de Maica de la Carrera y tejidos de Ghana, Malí y Costa de Marfil.

La idea surgió hace veintidós años, cuando Maica de la Carrera, una de las comisarias de la exposición y socia de la Asociación Cultural Mamah África, viajó a Senegal por primera vez e inició sus años de investigación sobre el textil africano. «Me llenó mucho el algodón, los estampados y todo lo que transmitían sus telas y decidí especializarme en ellas y traerlas a España por medio de diseños más occidentales», explicó la diseñadora sobre sus trabajos, que muestran la riqueza textil africana pero adaptada al gusto y los estilos europeos.

Junto a su hermana Laura de la Carrera, historiadora, decidió promocionar la cultura africana por medio del arte y de la moda, y así surgió una exposición que vio la luz por primera vez en el Museo Nacional de Antropología.