Toque de queda y cinco aspectos a los que afectarán las nuevas restricciones en Castilla y León

El toque de queda que instaurará la Junta de Castilla y León a partir de las 22:00 horas de este sábado afectará a distintos aspectos sociales de la vida de los castellanos y leoneses, a imagen y semejanza de otros lugares de Europa, pero con el condicionante de la propia forma de vida española, en la que la nocturnidad es más evidente que en el resto del continente.

Desde este sábado, aspectos como la movilidad, las reuniones sociales o familiares, así como la forma de relacionarse en espacios hosteleros se verán condicionados por una normativa que se aplica ante la escalada de la pandemia en la comunidad, con datos que preocupan en demasía al Ejecutivo autonómico.

De esta forma, la Junta trabaja en cinco grandes áreas que ya se vieron condicionados de una manera u otra durante la fase tres del confinamiento.

En el nivel tres se recomienda salir a la calle solo lo necesario y evitar, en la medida de lo posible, espacios cerrados. Se debe acudir a la oficina o la empresa solo de manera excepcional y se aboga por el teletrabajo.

Reuniones de seis personas. Se mantiene la obligación de que las reuniones acojan como máximo a seis personas tanto en la calle como en los domicilios. Hay que mantener la distancia de seguridad y las medidas de higiene.

Sin barras, pero abierto el interior. El nivel tres prevé el cierre del interior de los bares y restaurantes, aunque la Junta, en principio, no tiene intención de aplicarlo. Las barras seguirán cerradas y no se podrá fumar en las terrazas.

Los locales comerciales podrán acoger un tercio de su aforo en este nivel y los mercadillos, el 50%. Las medidas de higiene y distancia social son fundamentales en ambos ámbitos.

En velatorios, entierros o bodas se limita el aforo a diez personas en lugares cerrados y a veinte en espacios exteriores.