Castilla y León
CC OO denuncia «malos tratos» y «falta crónica de personal» en residencias de mayores públicas y privadasLa Federación de Pensionistas del sindicato afirma que en Salamanca, Ponferrada o Miranda de Ebro «se han documentado episodios especialmente graves« y exige la intervención de la Junta
La Federación de Pensionistas de CC OO Castilla y León denunció este sábado la situación «alarmante» que se vive en varias residencias de mayores de la comunidad, tanto de titularidad pública como de gestión privada o concertada.
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El sindicato afirmó que entre las «irregularidades más preocupantes», destacan «la falta crónica de personal de cuidados, así como casos de malos tratos, negligencia, mala alimentación y condiciones indignas para los residentes».
Desde el colectivo ligado a Comisiones Obreras se aseguró que en municipios como Salamanca, Ponferrada o Miranda de Ebro, «se han documentado episodios especialmente graves, que requieren una intervención inmediata por parte de las autoridades competentes».
La Federación de Pensionistas también lamentó la práctica de mantener a los residentes en los centros mientras se llevan a cabo obras de albañilería, lo que «implica ruidos, polvo y un entorno claramente inadecuado para personas mayores». «Esta situación, además de insalubre, puede agravar patologías previas y deteriorar el estado anímico de las personas afectadas», agregaron las mismas fuentes.
Cierre para los incumplidores
La organización sindical instó a la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades y a la Gerencia de Servicios Sociales de Castilla y León a «revisar en profundidad su sistema de inspección, especialmente porque muchas de estas visitas son anunciadas con antelación, lo que permite enmascarar deficiencias».
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Comisiones Obreras exigió asimismo que se «endurezcan los controles» y se actúe «con contundencia» contra los centros reincidentes, incluso con el cierre de aquellos que acumulen sanciones.
Por último, la Federación de Pensionistas de CC OO reclamó medidas «urgentes» ante los episodios de canícula que afectan a la comunidad, para evitar que las personas mayores sufran golpes de calor o situaciones de riesgo extremo, según informa Ical. «La dignidad y el bienestar de nuestros mayores no pueden seguir dependiendo de la pasividad institucional», sentenciaron desde el sindicato.
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