Un década reconociendo el compromiso social

Con una exposición y una mesa redonda, UGT Castilla y León conmemoró ayer los diez años de las Distinciones Pablo Iglesias, unos premios creados en 2005 para reconocer «el altruismo y el compromiso social», según señaló el secretario provincial del sindicato en Ávila, Luis Sánchez, acompañado por el secretario regional, Agustín Prieto. Aunque la iniciativa surgió en la capital abulense, adquirió un carácter provincial y regional a partir de 2008.

Prieto destacó el nivel de las distinciones, reflejado en «la calidad de los premiados, de todo tipo de ideologías pero muy comprometidos». La muestra recorre el plantel de galardonados desde la primera edición, cuando se reconoció a la Sara Escudero (de Cruz Roja) y a la Asociación Amigos del Pueblo Saharaui, hasta la última, que se entregará el 7 de octubre al médico Javier Cerrada, al folclorista Joaquín Díaz González, a la Asociación Española Contra el Cáncer en Ávila y al Centro de Investigación del Cáncer de Salamanca.

Tras inaugurar la exposición en el Palacio Los Serrano, se debatieron los retos de futuro de la sociedad castellano y leonesa en una mesa redonda en la que participaron el director de El Norte de Castilla, Carlos Aganzo; el presidente del CES de Castilla y León, Germán Barrios, y el profesor de Historia de la Universidad de Valladolid, Enrique Berzal de la Rosa, además de Prieto. Este último apostó por el «seguir fortaleciendo» el diálogo social e insistió en la necesidad de un suelo de gasto mínimo de unos 6.500 millones de euros.

Aganzo centró su intervención en el campo cultural, donde se han perdido «decenas de miles de actividades» en estos años de crisis que será «muy difícil» recuperar; algo que también ha ocurrido en el patrimonio aunque, en este caso, se cuenta con el respaldo del turismo-. En su opinión, la solución pasa por apostar por una educación de calidad.