Más de 300 vehículos estuvieron retenidos en Aguilar por el cierre de la A-67

Las intensas nevadas que cayeron ayer, día 2 de febrero, sobre el norte de la provincia obligaron a la DGT a cortar al tráfico pesado en varias carreteras. El paso de camiones por la A-67 se prohibió en las primeras horas del día entre Osorno y Cantabria, así como por diferentes tramos de la N-611 y la N-627. La situación se normalizó en las vías principales al mediodía y poco después sucedió lo mismo en las secundarias.

Pero todo dio un gran vuelco cuando cayó la noche, momento en el que comenzaron a bajar las temperaturas en la provincia y en el que la nieve se dejó notar con fuerza en Cantabria. De hecho, a las 19:30 horas el subsector cántabro solicitó la activación del nivel rojo y poco después llegó la denominada alerta negra, que prohibe la circulación de cualquier vehículo, lo que obligó a varios palentinos a hacer noche en las inmediaciones de Reinosa.

Del lado palentino de la A-67, en Aguilar de Campoo esperaban más de 300 vehículos, que quedaron retenidos en el polígono industrial a la espera de noticias. El tiempo iba pasando y esas noticias no llegaban. La alcaldesa de Aguilar ofreció la Escuela de Música del municipio para que las personas retenidas pudieran hacer noche allí, pero un quitanieves abrió paso a un convoy que pudo atravesar la zona cántabra nevada, cuando el nivel bajó a amarillo. Los dos autobuses retenidos y todos los turismos pudieron salir tras la quitanieves, aunque fueron varios los camioneros que decidieron hacer noche en tierras aguilarenses.