Valdestillas: el paso de los soldados de Flandes y su veneración por el templo

No hay lugar para las dudas de que el edificio más importante y emblemático de la localidad vallisoletana deValdestillas es la iglesia de Nuestra Señora del Milagro. Erigida en el siglo XVIII con restos del XVI se configura en torno a una nave cerrada por una bóveda de cañón con lunetos a orillas del río Adaja.

En el interior del patrimonio destaca el retablo mayor obra de Pedro Correa, del siglo XVIII, donde aparte de otras figuras procedentes de un retablo anterior, destaca la imagen de la patrona que es la que da el nombre a la iglesia.

Si ahondamos en los detalles de este templo cristiano ubicado en el Valle de astillas hallamos otro retablo barroco con una impresionante virgen Inmaculada que data del siglo XVII, un Cristo crucificado en la sacristía y un crucifijo de marfil del XVII.

Cuenta la historia de este municipio, que la virgen que da nombre a este templo, hoy rellamada del Milagro y patrona de la localidad, se apareció ante cuatro soldados de los Tercios de Flandes el 10 de mayo de 1602. Los soldados se acercaron a ella y presenciaron cómo el niño Jesús se desprendía de sus brazos y caía ante sus ojos. Lanzándose en su auxilio, la imagen de la Virgen abrió sus brazos y tras recoger a la criatura, volvió a inclinarse para recuperar la rosa que hoy pende entre las yemas de los dedos de la escultura.

La leyenda narra que los soldados difundieron el prodigio del que los vecinos pudieron dar fe al comprobar que el niño quedó vuelto y su rostro, que antes se dirigía a la Santísima, ahora mira al pueblo. En la actualidad, cuatro siglos después, se sigue conmemorando este milagro.

Este hecho que fue reconocido en 1620 por la Iglesia hizo que se convirtiera en objeto de devoción el milagro y la imagen para todos los ajeros o valdestillanos. Hoy se sigue rindiendo culto con la celebración de una misa en honor a la Virgen y la procesión de la talla del siglo XVI y dicho milagro da origen a la fiesta grande del pueblo del 10 de mayo.

De esta iglesia parroquial levantada entre tierra de pinares y líneas ferroviarias destaca el crucero que se cubre con una bóveda de arista con yeserías barrocas, a pesar de que ella es de estilo gótico, y decoración de triángulos mixtilíneos y temas vegetales. Si el turista quiere acudir a visitarla puede hacerlo en las horas de misa o llamando a la oficina de turismo o al propio Ayuntamiento.