Nueva Villa: la torre a la que debe su nombre
Especial Municipalismo. El patrimonio de Castilla y León ·
Sobre la planicie castellana se eleva la iglesia de Nuestra Señora del Castillo entre el eco de las antiguas cañadasel norte
Domingo, 23 de agosto 2020, 09:49
A una distancia de cincuenta kilómetros de la capital, enclavada en tierras de Medina y erigida sobre restos medievales encontramos la iglesia de Nuestra Señora del Castillo. Una joya del barroco construida en ladrillo en el siglo XVI que se levanta sobre una localidad que antiguamente se llamaba Villanueva de las Torres, de la que conserva el apellido y que hoy, ha pasado a ser Nueva Villa de las Torres.
Un pequeño camino delimitado por muros de piedra es el que acerca al visitante al sinuoso edificio, sin duda alguna, el más destacado de esta localidad.
Nuestra Señora del Castillo se edificó en el último tercio del siglo XVI sobre una planta rectangular que cuenta con un amplio presbiterio y una sola nave de dos tramos, sendos cubiertos con bóvedas orladas de ornatos en yeso.
Noticia Relacionada
«Todo por y para Nueva Villa»
La torre que se alza en el crucero y protagonista del topónimo del municipio está construida también con ladrillo y tiene tres cuerpos muy diferenciados, destacando la parte más alta en la que hallamos un campanario que sustenta una singular cruz de metal.
Accediendo por una restaurada puerta de madera y en apenas un vistazo el barroco se clava en las retinas del transeúnte. En el muro absidal se encuentra el retablo mayor que recientemente ha sido restaurado gracias a trabajos de limpieza y conservación que le garantizarán estabilidad y perdurabilidad en el paso del tiempo.
En la calle central del citado retablo, sobre la custodia, se encuentra la efigie del busto de la Asunción rodeada de ángeles. A ambos lados, se hallan las imágenes de San José y San Román Nonato. Un poco más arriba, se descubre el importante calvario, cuyos habitantes no quieren revelar el auténtico valor por miedo a que se lo arrebaten.
Sobre la cornisa más alta, Nuestra Señora del Castillo lleva grabada la fecha de 1734, que alude al año en que fue labrado.
Custodiando este templo barroco también se encuentran las imágenes de San Roque, San Isidro y Santa Isabel, la patrona del municipio a quien alude el dicho popular de la zona que «Hasta que no pasa Santa Isabel no se amaina el mal tiempo».
Del rico pasado de este pueblo, tal y como atestigua el nomenclátor de Floridablanca en el que se la señala como 'villa de realengo', cuenta algún historiador que en el sitio hubo en su día otra parroquia levantada bajo la advocación de San Juan, un convento de templarios y otro de monjas.
«Hasta que no pasa Santa Isabel no se amaina el mal tiempo», aseguran en el pueblo
En la actualidad ya nada queda de aquello y por ello los villanovenses tiene fiel advocación a su torre más alta, la iglesia de Nuestra Señora del Castillo.
Qué visitar
-
Patrimonio: Ermita del Cristo: Conocida por su cúpula de color rojo, presenta una estructura exterior que recuerda a las iglesias ortodoxas del este de Europa.Casa solariega.Se conserva como legado patrimonial un escudo noble.
-
De interés: Existe un lugar en el Camino del Caño de la Vega, que permite el alquiler de caballos y tras las fiestas de Santa Isabel se desarrolla un concurso de doma vaquera.