La Policía rescata a una joven que escapó de su expareja tras tres días de encierro

La joven, una vez a salvo, relató a los agentes que durante los tres dias anteriores fue retenida por él contra su voluntad en su propio domicilio y que logró huir de allí para refugiarse en la vivienda de su abuela, sita en José María Lacort. Solo que su maltratador la localizó, se presentó allí a gritos pasadas las tres de la mañana, reventó los cerrojos de la puerta de una patada, «arrastró» a la joven «de los pelos», le arrancó el teléfono de las manos cuando trataba de marcar el número de la Policía y la obligó a regresar a su casa, al otro lado del río. Lo primero que hizo en cuanto llegó, asegura la víctima, fue pagarla con las dos mascotas: pateó al perro y lanzó al gato por los aires.

La Policía Nacional, que ya había sido alertada de lo ocurrido por la madre de la chica y se personó con dos patrullas en el domicilio del barrio de La Victoria poco antes de las cuatro y media de la madrugada, e intentó entrar en el piso pero el joven, armado con un cuchillo, amenazó a la chica con matar primero a su gato y a ella si abría la puerta a los agentes. Finalmente, ella consiguió abrirla y ponerse a cubierto tras los policías, que detuvieron a su agresor y le pusieron a disposición judicial.

El magistrado titular del Juzgado de Violencia contra la Mujer 1 de Valladolid dictó prisión provisional comunicada y sin fianza para H. G., que desde ese fin de semana permanece ingresado en el centro penitenciario de Valladolid como presunto autor de un delito de retención ilegal y malos tratos.

El detenido, natural de Madrid, no es la primera vez que pasa por el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de Valladolid, ya que tiene antecedentes de maltrato contra una pareja anterior y se saltó una orden de alejamiento contra esta mujer. Fue condenado por quebrantamiento de condena y ya estuvo en prisión preventiva por esta otra causa. Esta imputado y pendiente de ser juzgado por este asunto anterior.