Y ahora... de rebajas (esto es un no parar)

No guarden la cartera, si es que aún les queda algún billete en ella. Esto es un no parar. El calendario que nos 'obliga' a comer como si no hubiera un mañana, a vestirnos como si tuviéramos que agasajar a los invitados con los ferrerosroché en la Nochevieja, a brindar con champán, cava o sidra por los presentes y los ausentes, a comprar regalos como si el año apenas tuviera un día, ahora nos trae marcada en rojo una nueva cita para seguir gastando: las rebajas, aunque ya no son lo que eran. Ni mucho menos.

Los empleados de los comercios tuvieron que prolongar su jornada en la noche de Reyes hasta la madrugada para poner los descuentos en los artículos y dejar todo listo para que este jueves, cuando abran las tiendas, los consumidores hagan lo propio y sigan gastando. El Corte Inglés, por ejemplo, espera recibir a 70.000 visitantes en sus dos centros de Valladolid. Y sus responsables ya tienen claro que los clientes buscarán artículos de confección de invierno, como abrigos o prendas de lluvia, así como artículos básicos de moda: prendas de temporada en todos los departamentos de moda para la mujer, el hombre, los jóvenes, niños, bebés.

Los comerciantes de Valladolid prevén un incremento del 5%, como casi todos los años, en la campaña de rebajas de la temporada de invierno, la misma subida que, según Avadeco, se ha producido en la campaña navideña y de Reyes que hoy concluye. Esta asociación señala en un comunicado que este año son más los comercios que han decidido adelantar sus descuentos (el 50%, según los datos de Avadeco), en especial en el subsector textil, calzado y complementos, que fruto de la suave climatología este otoño-invierno, acumulan mayor stock de producto que en años previos.

No obstante, según trasladan los comerciantes, otro 50% sigue prefiriendo mantener el 7 de enero como fecha de inicio, buscando cierto efecto reclamo del tradicional arranque de rebajas.

El gasto medio por persona se estima que sería algo superior al de 2015, pudiendo situarse entre los 70 y los 85 euros por persona en equipamiento, en Valladolid. En los últimos tiempos, desde que se liberalizaran en 2012 los periodos de rebajas, se ha producido una progresiva dilación del impacto y duración que estas campañas tienen sobre las ventas. En esta ocasión se estima apenas dure entre 10 y 15 días, similar al efecto que tuvo en 2015.

Además, Avadeco prevé que la mayoría de comerciantes hará un nuevo esfuerzo ofreciendo descuentos iniciales que partirán desde el 30 y hasta el 50% en estas rebajas, que podrían llegar en una segunda fase incluso hasta el 70% en determinados productos.

Los subsectores que probablemente más ventas realizarán en rebajas serán textil, calzado y complementos, equipamiento textil del hogar, electrónica, y, este año toma fuerza también el pequeño electrodoméstico. Según sus cálculos, más del 75% de los vallisoletanos acude a las rebajas de invierno, rebajas de notable importancia para el sector textil, que a diferencia de las rebajas de verano en Valladolid es clave para el resultado final de la campaña ya que, explica, las rebajas de invierno facturan el doble que las de verano.

Los comerciantes vuelven a censurar el exceso de promociones que hay durante la temporada, algo que frena el impacto de las rebajas, así como la desaparición de las fechas oficiales de inicio, que hace que el día 7 no se produzcan las colas de antes, aunque sea un día de gran actividad comercial, unida a los cambios de la campaña de Reyes. Mas de las mitad de las ventas del comercio se hacen ya en promoción, bien se en rebajas o con promociones puntuales.