El Calderón abre su Salón de los Espejos a Ernesto Calvo

Los juegos de los modales burgueses. Tan falsos como repetidos. Las convenciones sociales tratando de disfrazar su propia mentira. Ahora y siempre. El director y productor teatral vallisoletano Ernesto Calvo presentó ayer 'Reglas, usos y costumbres en la sociedad moderna', su último montaje teatral. Una obra de un solo actor para la que el teatro Calderón abrirá, por primera vez, su Salón de los Espejos como escenario.

Este espectáculo de pequeño formato podrá verse los días 8, 9 y 10 de abril (12 euros, taquillas del teatro), a partir de las 20.30 horas. 'Reglas, Usos y Costumbres en la sociedad moderna', del dramaturgo francés Jean-Luc Lagarce (1957-1995), representa el 'salón literario' inspirado en las reuniones de la baronesa Blanche Staffe creó a principios del XIX y que dio lugar a su 'Manual de buenas maneras'.

«Conocí este texto en Buenos Aires -recuerda Ernesto Calvo- y me impactó porque rompe los principios aristotélicos de tiempo, lugar y espacio». El director entendió que el texto y el formato se adaptaban al encargo que le hizo el gerente del Calderón, José María Viteri, de crear algo para «este otro corazón», del teatro, como definió ayer el gestor al Salón de los Espejos.

'Reglas, usos y costumbres...' ha sido un gran éxito en Francia, pero siempre como lectura monologada. Ernesto Calvo encontró en el actor uruguayo Gerardo Begérez, el «actor capaz que es la dama y la dama que es el actor», en referencia al papel doble que debe representar el único que se sube a escena. Un rostro y una presencia «iluminadas por la luz» de Juan Carlos Moretti, el actor que tanta huella dejara en Valladolid y que fue uno de sus descubridores en la escena rioplatense.

«Estoy sólo en el escenario y lejos de los actores con los que trabajo y los directores en los que confío», reconoció Begérez que reconoció el «desafío de hacer mi primer monólogo lejos de casa».

El Salón de los Espejos (con una capacidad para unas 150 personas) será un elemento escénicos más, aunque le está dando quebraderos de cabeza a su director. La obra viajará después por Sudamérica.