La poesía resiste en un mundo postapocalíptico

La pandemia, aunque ha hecho mucho daño al sector, no ha podido con la cultura y tampoco con la poesía. Prueba de ello fue la celebración de la quinta edición de la gala aniversario de los Micros Abiertos de Poesía una iniciativa del colectivo Gente Festeamus, que organiza una cita mensual en torno a los versos. En un 2020 complicadio, el colectivo trató de mantener sus citas con toda la normalidad que el coronavirus ha permitido, llevando la poesía a distintos rincones de la localidad, también de manera virtual, modo en el que la iniciativa se desarrolló en el mes de marzo, a través de las redes sociales de Festeamus.

En esta ocasión, el escenario escogido un año más fue la sala cultural Alfonsa de la Torre, con un aforo de público muy reducido, pero con las mismas ganas de siempre de disfrutar de la poesía, que también en esta ocasión se mezcló con la música e incluso con el humor, gracias a la colaboración de los actores Maite Sánchez y Sergio Caminero, miembros de Teatro Naos, que en cada edición participan en esta gala.

El escenario en el que el público vivió esta gala fue un mundo postapocalíptico, en el que se reúnen los supervivientes para dar la bienvenida al nuevo año 2201. Sin embargo, en los primeros minutos de la gala, el humor llenaba el patio de butacas, con los actores ataviados como limpiadores, desinfectando todos los espacios y pidiendo algo de cultura, puesto que esta, en el nuevo panorama, ya no existe.

Sánchez recorrió las filas de espectadores desinfectando, pero también pidiendo pentagramas, notas musicales, una partitura de Agapito Marazuela o una flauta dulce. «Estamos buscando en los callejones para ver si podemos recitar algún trozo de un poema», señalaba, mientras relataba cómo hace dos siglos se tuvieron que quemar todos los auditorios, haciendo un guiño a la falta de esa infraestructura cultural en la villa. Arrancó las risas del público con un «menos mal que aquí no construimos auditorio, porque si no hubiéramos tenido que limpiar cantidad».

Su compañero limpiador apareció con una dramaturga a la que había encontrado y capturado, con el fin de llevarla al contenedor preparado para los artistas. Sin embargo la dramaturga se escapa, y aunque «lo puede contaminar todo», subió al escenario, desinfectó el micrófono y dio paso a los primeros poemas de la noche.

A lo largo de la gala, en torno a una veintena de participantes fueron recitando sus poesías, tanto propias como de autores, poetas más o menos conocidos, algunos locales. Tampoco faltaron las canciones en directo o los poemas musicados.

La Asociación Cultural Gente Festeamus cerró con esta gala un año más de sus Micros Abiertos de Poesía, iniciativa que desarrollan mensualmente y que cuenta con la participación de decenas de personas en cada una de sus ediciones. Junto al Festival Festeamus, es una de sus actividades más conocidas, aunque no la única.

La agrupación trabaja desde el año 2010 en el desarrollo cultural de Cuéllar y su comarca, con el fin de mejorar la calidad de vida de sus vecinos a través de propuestas lúdico-culturales que permitan favorecer la divulgación de valores culturales entre la población, además de reforzar los vínculos intergeneracionales, buscando actividades para todas las edades. En el colectivo trabajan bajo la pre misa de intercambiar y compartir los proyectos, las ideas y los recursos, de forma que se pueda dotar a los vecinos de la comarca de herramientas sociales con las que empoderarse a través de la promoción de la cultura y la educación, y así evitar que se vayan a otros lugares a buscar oportunidades. Para ello permanecen abiertos en todo momento a la recepción de cualquier proyecto o idea cultural, siempre que llegue acompañada de personas dispuestas a desarrollarlo sosteniblemente.

En este sentido, en 2020 iniciaron el proyecto de montaje y puesta en escena de la obra de teatro dramática 'Cierva acosada', de la poeta cuellarana Alfonsa de la Torre, con el propósito de conseguir su escenificación y estreno, lo que en buena parte ya se ha logrado, pues hace unos meses se realizó un ensayo general abierto al público en el que se puso en escena el primer acto del montaje, a pesar de las dificultades que tuvieron que sortear debido a la pandemia. El hecho de realizar este montaje teatral en Cuéllar, población que carece de teatro-auditorio, para Gente Festeamus puede suponer un aliciente para que las instituciones comenzaran a tomar conciencia y resolvieran esta carencia de forma definitiva, por lo que se seguirá trabajando en ello.

Este es solo uno de los proyectos en los que trabaja el colectivo. El grupo también se centra en la creación de proyectos de distinta envergadura a lo largo del año, como talleres de participación de temática variada y para todos los públicos, programaciones de teatro, arte, música, poesía, concursos, exposiciones, excursiones y unas jornadas de arte y diversidad.