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Las calles de Cuéllar se llenan de ritmo
La villa albergó su tradicional 'Paseo musical' protagonizado por los alumnos de la escuela municipal Cecilio de Benito
Un año más, de la mano de los alumnos de la escuela municipal de música Cecilio de Benito y su tradicional 'Paseo musical', las calles de Cuéllar se llenaron de ritmo y público, que no dudó en aprovechar la buena temperatura para recorrer diversos puntos de la localidad y disfrutar de los sones que ofreció la cantera musical cuellarana.
El 'Paseo Musical' es una iniciativa que viene desarrollando desde hace años el centro de estudios. Sus profesores y alumnos dan a conocer el trabajo realizado en las diferentes disciplinas, aprovechando también el final del curso y la celebración del Día de la Música.
El recorrido comenzó en la calle Ávila y los primeros sones que se escucharon fueron los de las dulzainas, que realizaron un pequeño pasacalles hasta el entorno de la Escuela Municipal de Música, donde comenzaron las actuaciones, con los más pequeños y sus clases de música y movimiento, para dar paso después a las actuaciones de piano, música de cámara, guitarra y canto.
De nuevo, los sonidos de las dulzainas anunciaron un cambio de escenario, y, a través de un pequeño pasacalles se dirigieron hasta la plaza de los Coches, en cuyo entorno se situaron los alumnos de percusión, que mostraron los ritmos aprendidos con diferentes instrumentos. Un nuevo pasacalles llevó a los asistentes hasta la calle Parras, a lo largo de la cual se fueron sucediendo las actuaciones de instrumentos como los clarinetes o los violines.
Finalmente, las dulzainas tomaron de nuevo la calle Parras, aunque en esta ocasión en sonido descendente, para regresar de nuevo al entorno de la plaza de los Coches, donde tuvo lugar el concierto final del paseo, a cargo del grupo The Big Band Theory, formado por alumnos de varias asignaturas, que unen sus notas musicales dando paso a una banda que interpreta algunos de los temas más escuchados del momento, además de otros más clásicos, con una importante representación de instrumentos de viento.
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Coincidiendo con los últimos compases del curso, la Escuela tiene previstas también las tradicionales audiciones, que comenzaron ayer mismo en la Huerta de la Alegría con los alumnos de clarinete, violín, cámara, flauta, piano, canto y guitarra. Seguidamente fueron los alumnos de dulzaina y percusión los que dieron a conocer parte de lo aprendido durante el curso, cambiando el escenario hasta el parque de la Huerta del Duque, donde seguidamente animaron la celebración de la Noche de San Juan, en la que no faltó la tradicional hoguera y un chocolate con bizcochos para todos los asistentes.
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