Queda inaugurada esta Naviland

Es una cita ya consolidada dentro de la programación navideña que muchos niños esperan con ganas. Es el parque de ocio, aventura y entretenimiento Naviland, que por séptimo año consecutivo ha abierto sus puertas en el Pabellón Pedro Delgado.

Como todos los años, un Papá Noel gigante da la bienvenida a los más pequeños en el exterior del recinto. Una vez que se cruzan las puertas de entrada, las pistas deportivas vuelven a ser un auténtico parque de atracciones para niños de entre dos y catorce años.

La actividad, que ha sido inaugurada este lunes, estará abierta hasta el próximo viernes 30, por la que se espera que pasen unos 5.000 niños acompañados de sus familiares. Y es que tienen donde elegir para pasar un rato más que divertido. Además, este año existen atracciones nuevas, como un tren sobre vías que hace treinta metros de recorrido y un hinchable grande denominado 'Wipe Out', donde los pequeños tienen que pasar de una bola a otra para llegar de un extremo a otro, «similar a los que había en el programa de televisión 'Humor amarillo'», comenta Néstor Fernández, director general de Trackter Eventos Especiales.

Otra de las actividades estrella son las camas elásticas, que este año se han incrementado porque «empezamos los primeros años con cuatro, luego con seis y este año con ocho», destacó Fernández.

Además de estas actividades, el parque de ocio Naviland cuenta con otras atracciones que repiten debido a que «tienen mucho éxito», como una zona con cinco hinchables diferentes, donde los pequeños pueden pasar de uno a otro, diez animales eléctricos y un gran hinchable donde los niños deben sortear diferentes dificultades.

Los más atrevidos también pueden disfrutar de actividades de aventura como un rocódromo donde, equipados con casco y arneses, pueden escalar por una pared acolchada, una de las actividades preferidas por los chavales porque «cada año llego más alto», asegura contenta Irene, de 8 años.

También se aprende

Otra de las novedades de Naviland viene este año en forma de taller, de la mano de Centros Genios. El objetivo es ver las habilidades de los niños porque «consideramos que todos los niños son genios y lo intentamos potenciar», aseguró ayer uno de los responsables, Alfonso Vigil. Tienen cinco métodos educativos, que son robótica, experimentos, ábaco, idiomas e inteligencias múltiples. El taller dura treinta minutos. Para participar, los organizadores hacen una pequeña evaluación psicológica para comprobar su potencial. En media hora realizan diferentes pruebas, como la del Bee bot, un robot educativo al que deben dar «órdenes sencillas para llegar a su destino».

Los que ya han acudido a Naviland también han disfrutado del taller de arcilla polimérica, con la que se puede realizar todo tipo de creaciones, porque «trabajamos la psicomotricidad, la imaginación o las dimensiones», explicó la responsable de la Casa de la Arcilla y presidenta de NeuroFuturo, Carmen Calderón. Toda la recaudación que se consiguió ayer en este taller será donada íntegramente para la unidad de tratamiento Therasuit.

En Naviland también colabora el Ayuntamiento de Segovia y el Instituto Municipal de Deportes, porque «es una actividad que complementa muy bien a las de la concejalía de Educación y Juventud», explicó ayer el concejal Álvaro Serrano. La atracción cuesta 1,75 euros, aunque existen bonos de varias entradas que reducen el precio, como el de 10 fichas por 12 euros.